El Paso

Refugiados afganos comienzan a llegar a Fort Bliss




agosto 21, 2021
El Complejo de la Cordillera de Doña Ana en Fort Bliss se está utilizando como alojamiento temporal para ciudadanos afganos que han ayudado a los Estados Unidos. Fotografía del Ejército de EEUU, por el Sargento Michael West

Refugiados de Afganistan, que huyeron de su país tras el arribo de los talibanes al poder, comenzaron a llegar al complejo militar de Fort Bliss en Doña Ana, Nuevo México, a unos 110 kilómetros de Ciudad Juárez

René Kladzyk / El Paso Matters

El Paso– Refugiados de Afganistán llegaron al Complejo de Cordillera Doña Ana de Fort Bliss este sábado, parte de lo que el Departamento de Defensa dijo que podría ser la segunda operación de evacuación de no combatientes más grande en la historia de Estados Unidos.

Un portavoz del Ejército Norte de Estados Unidos confirmó que “los solicitantes de visas especiales de inmigrante, sus familias y otras personas en riesgo” están alojados en Fort Bliss y Fort Lee en Virginia.

“El equipo de la primera División Blindada está brindando apoyo especial a los afganos en Fort Bliss, como alojamiento, en el Complejo Doña Ana Range de Fort Bliss en Nuevo México, donde pueden finalizar su procesamiento de inmigración de manera segura”, dijo el portavoz.

El programa de visas especiales de inmigrante SIV se creó como parte de la Ley de protección de los aliados afganos en 2009 y otorga a los destinatarios los mismos beneficios y asistencia que a los refugiados. Las personas que trabajaron con el ejército estadounidese en Afganistán como traductores, intérpretes u otros contratistas son elegibles para recibir un SIV. Pero un atraso en el largo proceso de solicitud ha impactado a los miles de personas desesperadas por salir de Afganistán, en medio de la rápida toma del poder por parte de los talibanes, debido a que muchos tienen solicitudes SIV incompletas o pendientes.   

La evacuación de Afganistán en curso es la mayor expulsión de no combatientes por parte del ejército estadounidense desde que 20 mil miembros del servicio estadounidense y sus familias fueron sacados de Filipinas tras la erupción del monte Pinatubo en 1991 .

Los refugiados serán alojados temporalmente en las bases del Ejército hasta que puedan ser colocados en viviendas más permanentes, dijeron funcionarios estadounidenses.

El portavoz del ejército no dijo cuántos refugiados afganos se alojarán en Fort Bliss ni proporcionó una estimación del tiempo que permanecerían allí. Un comunicado de prensa de Fort Bliss dijo que esperan que lleguen más refugiados en los próximos días.

“Como se puede imaginar, hay mucha actividad asociada con la llegada”, dijo. “Por razones de seguridad … no revelaremos detalles específicos sobre los que llegaron o sobre futuras llegadas”.

Algunos líderes y defensores locales han expresado su preocupación por la poca información que se les ha proporcionado sobre los planes para los refugiados afganos en la zona.

“Realmente desearía que tuviéramos un contacto en Fort Bliss con el que pudiéramos sentarnos y hablar y decir ‘OK, estamos anticipando un número X de personas y, en general, esto es lo que esperamos en términos de su estado migratorio” dijo Melissa López, directora ejecutiva de Servicios Diocesanos para Migrantes y Refugiados durante una entrevista con El Paso Matters el jueves. “Pero, literalmente, no sabemos mucho en términos de qué esperar al venir a Fort Bliss”, agregó.

Un C-17 Globemaster III de la Fuerza Aérea de EEUU transportó a 823 ciudadanos afganos desde el Aeropuerto Internacional Hamid Karzai el 15 de agosto de 2021.  
Fotografía: cortesía de la Fuerza Aérea de EEUU

En opacidad, los planes para refugiados afganos en El Paso

Los líderes locales y defensores en El Paso dijeron el jueves que no saben lo que podría significar una nueva población de refugiados afganos para la frontera.

“Nadie nos llama. Nadie habla con el liderazgo ”, dijo el juez del condado de El Paso, Ricardo Samaniego.

Samaniego dijo que le preocupa que la nueva población de refugiados pueda tener profundas consecuencias para las organizaciones humanitarias locales y agregó que los funcionarios del condado de El Paso no han sido contactados por el Departamento de Estado o el Departamento de Defensa de los Estados Unidos sobre sus planes.

“No hay nada peor que un funcionario electo que tiene información limitada”, dijo Samaniego.

Algunos legisladores de Texas han expresado su apoyo a los planes para albergar a refugiados afganos en El Paso, pero los detalles del plan en sí han sido escasos. “Los detalles completos de este apoyo aún se están elaborando”, dijo el comunicado del Ejército.

Melissa López, directora ejecutiva de Servicios Diocesanos para Migrantes y Refugiados en El Paso, dijo que la falta de información significa que las organizaciones locales tienen pocas oportunidades de prepararse para recibir a los refugiados afganos en la comunidad fronteriza.

“Desafortunadamente, en esta situación, básicamente caminamos a ciegas”, dijo. “No sabemos cuántos, no sabemos quiénes, no sabemos (si) tienen la intención de quedarse en El Paso… así que creo que ahí es donde radica mi frustración, que va a ser tan caótico para ellos.”

En los últimos días, los talibanes se han apoderado rápidamente de Afganistán y el gobierno afgano se ha derrumbado tras la retirada de las tropas estadounidenses del país de Asia Central. Los talibanes, un grupo militante conocido por interpretaciones brutales y extremas de la ley islámica, como prohibir a mujeres y niñas asistir a la escuela o participar en la vida pública, amputaciones como castigo por robo y prohibir la música, hicieron una toma rápida del poder dejando a miles de afganos desesperados por salir del país.

Estados Unidos invadió Afganistán después de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, iniciando lo que se ha convertido en la guerra más larga en la historia de Estados Unidos. Sin embargo, la participación de Estados Unidos en Afganistán precede al 11 de septiembre. En la década de 1980, una operación encubierta de la CIA canalizó miles de millones de dólares hacia las guerrillas afganas como parte de una guerra en la sombra contra la Unión Soviética.

La retirada total de las tropas estadounidenses de Afganistán se planificó desde principios de 2020, aunque el presidente Biden retrasó la fecha de retirada inicial anunciada por el expresidente Trump. Biden ha enfrentado críticas porque no se hizo más en preparación para sacar del país a estadounidenses y aliados afganos.

En los 20 años transcurridos desde la invasión de Afganistán, 300 mil afganos han trabajado para ayudar a Estados Unidos, a menudo con un gran riesgo personal, según el Comité Internacional de Rescate . Muchos de los que trabajaron para el ejército de Estados Unidos. Y sus familiares pueden calificar para visas especiales de inmigrante, que dan derecho a los beneficiarios a beneficios de reasentamiento similares a los de los refugiados.

Pero 20 mil solicitudes pendientes en el proceso de 14 pasos han creado un atraso en los visados especiales conocidos como SIV, para los cuales se estima que 70 mil afganos son elegibles para postularse, según el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales , una organización de investigación bipartidista.

López dijo que cree que el atraso puede significar que aquellos que lleguen a Fort Bliss serán una “bolsa mixta” en términos del estado de su solicitud de SIV, y señaló que Fort Lee en Virginia ha recibido refugiados afganos que se encuentran en las etapas finales del proceso de SIV.

Los afganos con solicitudes pendientes en Fort Lee ya habían pasado el control de seguridad del Departamento de Estado antes de ingresar a Estados Unidos, con planes para que las personas con un nivel más bajo de aprobación de visa sean llevadas a otros países para su procesamiento antes de llegar a los Estados Unidos, según un informe de julio del Washington Post.

López cree que los diferentes estatus de SIV entre los refugiados afganos podrían ejercer presión sobre la comunidad legal local.

“Vas a tener a todas estas personas que están en un limbo legal. Entonces, la mayor preocupación que tengo es una, qué tipo de necesidades legales van a tener cuando lleguen. Y luego dos, solo en términos de números, ¿cuántas personas van a necesitar esa ayuda?” dijo.

La representante federal Veronica Escobar, demócrata por El Paso, dijo que entiende las preocupaciones de los defensores locales, pero enfatizó que la situación es muy fluida y nueva.

“Tan pronto como podamos brindar más información al público, lo haremos”, dijo.

Escobar comentó que la evaluación en curso para Fort Bliss incluye la coordinación para trabajar en colaboración con Nuevo México, donde se encuentra parte de Fort Bliss, y señaló que hay organizaciones humanitarias de Nuevo México que tienen experiencia.

“Para mí, todo vuelve a la premisa principal, que es, tenemos una obligación con estos individuos y estas familias. Voy a hacer todo lo posible para asegurarnos de que tengamos los recursos y el apoyo adecuados para que podamos hacer lo correcto con estas familias e individuos que arriesgan sus vidas junto con los miembros del servicio estadounidense ”, dijo Escobar.

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Este contenido es publicado por La Verdad con autorización de El Paso Matters. Ver original aquí.

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