Los tiempos de espera para ingresar y regresar de Estados Unidos por los puertos fronterizos se pueden alargarse desde el lunes; autoridades estadounidenses prevén más personal en las garitas, en Ciudad Juárez alistan cierre de vialidades cercanas a los cruces internacionales para evitar congestionamientos y conflictos viales
Verónica Martínez e Iván Gómez / La Verdad*
Entre las cinco y seis de la tarde, Estefanía Castillo sale de su trabajo en la Universidad de Texas en El Paso, pero llegar a su hogar en Ciudad Juárez le puede tomar más de una hora con las largas filas que se forman en los cruces internacionales.
Al haber estudiado en El Paso desde el segundo grado, Castillo ha estado acostumbrada a esta dinámica de vivir en un lado de la frontera y cruzar diariamente para estudiar o trabajar en el otro. Desde marzo del 2020, estos cruces fronterizos se habían limitado solo a ciudadanos estadounidenses, residentes permanentes y personas que viajan por razones esenciales como Castillo.
Sin embargo, a partir del 8 de noviembre se levantarán estas restricciones de viaje permitiendo que nacionales mexicanos vuelvan a cruzar a El Paso para visitar familiares, amigos, ir de compras y realizar viajes turísticos.
“No me imagino como va a estar ya cuando la gente pueda cruzar (otra vez)”, dijo Castillo. “Sé que va a ser algo que nos va a afectar para los que cruzamos diario”.
Este martes, autoridades fronterizas de Estados Unidos plantearon los procedimientos para la reapertura de la frontera para viajes no esenciales el próximo lunes, pero también advirtieron que con el incremento de tráfico transfronterizos podrán presentarse tiempos de espera más largos en los cruces internacionales.
“Sabemos y esperamos que los tiempos de espera para viajar incrementarán, pero estamos también esperando tener el personal necesario mientras esta oleada de viaje se reanuda”, dijo Matthew Davies, director ejecutivo del Programa de Admisibilidad y Pasajeros de la oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP por sus siglas en inglés).
Sobre lo que panorama de tráfico previsto a partir del lunes en la zona de los cruces internacionales, Antonio Díaz Sologuren, docente de la licenciatura en Seguridad y Políticas Públicas en la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, considera que las personas que cruzan a diario enfrentarán una tardanza mayor, debido a que se estarán pidiendo los certificados de vacunación en las garitas además de los documentos migratorios, como las visas.
“Van a haber muchas problemáticas debido a circulación, lo mismo de siempre, pero en otro esquema, otra tesitura. Podemos recordar a lo que pasó en el 9/11, la tardanza en la revisión va a ser mayor”, dice.
“Se nos pedirá constancia de vacunación y sabemos que las autoridades de salud estadounidenses no aprobaron todas las vacunas; entonces no faltarán las personas que se quieran aventar a ver si pega, a ver si no los revisan, a ver si los dejan pasar aunque cuenten con una vacuna no aprobada por ellos. Todo eso ocasionará un retraso tremendo en los cruces”, advierte.
El académico señala que durante este tiempo sin viajes no esenciales hacia El Paso, las filas han permanecido considerablemente largas debido a los residentes y ciudadanos norteamericanos, y expresa que ellos y los estudiantes que cruzan a diario serán quienes más recientan el incremento en el número de peatones y automóviles.
En Juárez, alista cierre de vialidades en zonas de puentes
Anticipándose al tráfico que puede presentarse en zonas aledañas a los puentes internacionales, la Coordinación General de Seguridad Vial en Ciudad Juárez anunció que se prevé cierre de algunas vialidades cercanas a los cruces hacia El Paso, Texas.
“Se está revisando (el cierre de calles)… de manera que no se obstruya a los guiadores que pasan por ahí”, dijo César Alberto Tapia Martínez, coordinador de Seguridad Vial.
La dependencia informó que se contempla cerrar el paso vehñicular por el Callejón Carreño y las calles María Martínez, Ignacio Mejía, Colón y Azucenas, todas cercanas al puente Paso del Norte, en la zona centro de Ciudad Juárez.
Respecto al puente Córdova Américas, indicó que se contempla tener a un agente se ubicará a la altura del monumento a Los Indomables, para evitar que algunos guiadores intenten ingresar a la fila de manera intempestiva; además, se dispondrá de un elemento sobre la Ramón Rayón para evitar el bloqueo del tráfico local cercano al puente Zaragoza.
En El Paso, nuevas vialidades y cambios en la circulación
Además de las largas filas para cruzar a El Paso, los automovilistas que no han viajado desde marzo del 2020 se toparán con nuevas vialidades y cambios en sentidos de circulación en la vecina ciudad.
Autoridades del Departamento de Transporte de Texas (TxDOT, por sus siglas en inglés) dieron a conocer que agregaron conectores directos entre la interestatal I-10 y la calle Loop 375, en una ubicación en el centro de la ciudad donde antes no existía ninguno. Un gran impacto de este cambio es que el tráfico que ingresa desde Ciudad Juárez, en los carriles de extrema derecha ya no puede acceder a la I-10 procediendo a través de la señal en Paisano.
Este es un gran cambio, y es probable que confunda a las personas hasta que se acostumbren, dice Jennifer Wright, portavoz del TXDOT.
Antes, se podía cruzar Paisano en el nivel medio y acceder a una rampa en la I-110 desde la calle San Antonio. Esta rampa ha sido eliminada, por lo que para llegar desde el puente a la I-110 o US-54, el tráfico tendrá que permanecer en la I-110 bajo el intercambiador de Paisano. La carretera frente a los carriles que emergen del Puente de las Américas será una calle de doble sentido dentro y fuera del vecindario de Findley / Latta, dice.
Tráfico transfronterizo cae con la frontera cerrada
Con la frontera de Estados Unidos cerrada, el año 2020 vio una disminución significativa en los volúmenes de tráfico transfronterizo del 42 por ciento en comparación con el 2019, según datos de los reportes anuales de viaje y comercio de CBP.
El Departamento de Transporte de Estados Unidos registró en el 2019 a más de 10 millones 528 mil vehículos personales que cruzaron por el sector de El Paso, mientras que en el 2020 ese número disminuyó por casi a la mitad, a 5 millones 605 mil 237. Lo que va del año 2021 el departamento solo ha registrado 3 millones 907 mil 964.
Esta disminución de tráfico pasajero permitió que CBP transfiriera recursos y personal que operaban los puertos de entrada para pasajeros a las entradas de embargo comercial, dijo el asistente ejecutivo comisionado de la Oficina de Operaciones de CBP, William Ferrara.
Regresaran a personal a garitas, aseguran
La agencia fronteriza espera volver a tener los mismos niveles de personal operando en los puertos de entrada internacionales como antes de la pandemia, dijo Davies en una conferencia de prensa en la que se anunciaron los procedimientos de cruce y la documentación necesaria para viajeros internacionales.
Aunque los niveles de tráfico no han llegado aún a los niveles anteriores de la pandemia, desde febrero de este año el tráfico a ido aumentando por mes. Un total de 391 mil 076 vehículos personales cruzaron por el sector de El Paso en el mes de febrero y para a agosto la cantidad subió a 557 mil 942 vehículos, según datos del Departamento de Transporte.
Yoselin Martínez, juarense que trabaja en una agencia de logística aduanal en El Paso, continuó cruzando la frontera de forma habitual. Fue este año, con el regreso a clases gradual, que notó tiempos de espera más largos en los puentes.
“Si noté que había menos fila, pero era porque también estaban cerradas las escuelas en los Estados Unidos y los que viven en Juárez que eran ciudadanos no iban para nada”, dijo Martínez que durante la pandemia siguió trabajando de forma presencial en la oficina de la agencia.
“Para mí la vida siguió igual. Seguía cruzando con cubreboca pero seguía cruzando”.
Martínez cruza bajo el programa SENTRI reduciendo sus tiempos de espera en las mañanas que va al trabajo. En los peores de los casos, la juarense hace alrededor de cuarenta minutos en la fila, pero este servicio no esta disponible para viajes de entrada a México. Martínez considera que el regreso a Ciudad Juárez será cuando vea esperas más largas, especialmente en las ocasiones que tenga que trabajar los fines de semana.
A pesar de esto Martínez considera que ya era justo que los cruces fronterizos se abrieran para los nacionales mexicanos. Como muchos juarenses, parte de la familia de Martínez vive en El Paso y para ella el cierre de la frontera dividió su vida en dos.
“Fue triste y estresante”, dijo Martínez. “Yo siempre he pensado que Juárez y El Paso son una ciudad a pesar de que nos divida el bordo y hablemos diferentes idiomas”.
*El Paso Matters contribuyó con esta historia
laverdadjz@gmail.com