Los buzos rescatistas continúan a la espera del desagüe suficiente de la mina Pinabete en Coahuila para poder ingresar. Los trabajos de rescate son prioritarios y continúan con “mucha fe”, aseguró el presidente López Obrador. La segunda prioridad es fincar responsabilidades y castigar a los culpables
Por Arturo Contreras / Pie de Página
CIUDAD DE MÉXICO.- “Uno: rescate. Dos: fincar responsabilidades y castigar a culpables. Tres: protección a familiares”, ese es el plan de la Presidencia de la República para rescatar a los 10 mineros atrapados desde el miércoles 3 de agosto en la mina Pinabete, en el lote de Las Conchitas, en Sabinas, Coahuila. Así lo dijo el presidente López Obrador en su conferencia diaria de este lunes.
“Estamos buscando hacer lo más rápido la extracción”, dijo López Obrador, quien evadió la pregunta de qué probabilidad de había de que los mineros aún siguieran con vida.
“Todos tienen fe, nadie está pensando en otra cosa más que en el rescate. Nos explicaban que cuando se trabaja en esas minas los mismos mineros hacen huecos o refugios, y eso es lo que se está pensando. Entonces, hacer lo más rápido posible la extracción, el desagüe para poder entrar”.
Este lunes la Comisión Nacional de Protección Civil introdujo un dron submarino para verificar que haya condiciones para que entren buzos rescatistas. El dron es propiedad de la Marina y cuenta con luz y una cámara de alta resolución.
Hasta esta mañana aún se trabajaba en la extracción del agua a través de perforaciones en cámaras contiguas a las que están inundadas y donde se cree podrían estar los mineros atrapados. La hipótesis que tienen los rescatistas del gobierno es que los mineros rompieron las paredes que separaban esta esta mina de otra, abandonada hace tiempo, muy grande, que tenía una gran acumulación de agua.
La búsqueda de los responsables
Desde el 5 de agosto pasado la Fiscalía General de la República (FGR) abrió una carpeta de investigación por posibles delitos alrededor de la inundación de la mina; también pidió un informe de los mineros involucrados al Instituto Mexicano del Seguro Social y solicitó información a la Secretaría de Economía sobre la concesión minera y su titular, sin embargo, aún no se aclara qué empresa era propietaria de la mina.
A pesar de que se detuvo a una persona momentos después del derrumbe, se cree que él es un trabajador menor y que la persona a cargo de la mina huyó después de observar el siniestro, como ya lo había reportado Pie de Página.
Hasta el momento hay dos personas señaladas de ser las responsables de la mina. El primero es Cristian Solís Arriaga, un muchacho de 26 o 27 años que es quien inscribía a los mineros al Seguro Social, mientras que un informe de Protección Civil citado por el medio local El Coahuilense señala a Régulo Zapata Jaime, exalcalde de Sabinas. Aunque hay un tercero, según el título de concesión de la mina expedido por la Secretaría de Economía, la dueña del tiro de carbón es la Minera Río Sabinas, propiedad de José Ángel Ramírez Ramón.
Esta mañana el presidente de la República citó más información de ese título de concesión al decir que se había expedido en 2003, durante el sexenio de Vicente Fox y que tiene una vigencia de 50 años (como la mayoría de este tipo de concesiones que se adjudican por 50 o 100 años). “Empezó a funcionar creo que en el 21, el año anterior, sin aviso, sin nada”.
El presidente dijo que la mina inició sus operaciones de forma clandestina, como muchísimas otras en esta región carbonífera. La mayor parte de la producción de estas minas llega a la Comisión Federal de Electricidad para la generación de energía, sin embargo, a veces es difícil vincular a la CFE con minas irregulares, pues hay una empresa intermediaria que legitima la venta del combustible.
La Fiscalía podría tener problemas al identificar a la empresa o la persona responsable de la mina, porque además de este entramado de empresas que compran y venden carbón, en el país también opera un mercado gris de concesiones mineras que desdibujan la responsabilidad legal.
La atención
De acuerdo con la titular de la Comisión Nacional de Protección Civil, Laura Velázquez Alzúa, en el lugar del accidente se instaló una cocina comunitaria en donde se reparten 50 raciones diarias de comida caliente, además de que hay brigadas de la Sedena con personas que platican con las familias de los mineros y les ofrecen orientación sicológica. La funcionaria informó que existen más de 500 personas funcionarias locales y federales trabajando en rescate.
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Este trabajo fue publicado originalmente en Pie de Página que forma parte de la Alianza de Medios de la Red de Periodistas de a Pie. Aquí puedes consultar la publicación original.
