Familiares de personas migrantes desaparecidas instalaron un memorial frente a Palacio Nacional. El retrato de Óscar Antonio López Enamorado ocupa un lugar frente a la puerta Mariana. Es un recuerdo de la promesa que el presidente hizo de encontrar a las personas desaparecidas y que podría quedar incompleta ante la desaparición de la Comisión Nacional de Búsqueda
Texto y fotos: Arturo Contreras Camero / Pie de Página
Ciudad de México- La historia de Ana Enamorado es conocida para el presidente López Obrador. Ana llegó a México hace 12 años buscando a su hijo migrante, de quien supo por última vez en Jalisco. “Esto se va a acabar, ya verás que todo esto se va a resolver”, dijo el presidente a Ana antes de iniciar su mandato durante los foros de pacificación, mientras sostenía la imagen de Óscar, el hijo de Ana.
Cinco años después, Ana Enamorado sigue sin saber del paradero de Óscar. Hoy, a 14 años de su desaparición Ana se ve obligada a dejar la imagen de su hijo frente a Palacio Nacional como una prenda de su petición a López Obrador.
Mientras lo hacía, Ana Enamorado leyó una carta al presidente:
“Señor presidente, soy una madre hondureña que ya conoce. En este 19 de enero se cumplen 14 años de la desaparición de mi único hijo. Le pido diez minutos de su tiempo para reunirse conmigo. No se vaya sin antes atender a las familias que estamos pasando por este duro dolor. Necesitamos su ayuda, usted sabe cómo hacerle y cómo encontrar a mi hijo”.
Migrante y desaparecido: la trampa del olvido
Óscar representa una de las más de 114 mil personas desaparecidas reconocidas en el Registro de Personas Desaparecidas y No Localizadas. También, representa a un grupo que sistemáticamente olvidado y desatendido, el de las personas que se tiene que mover de sus países para buscar mejores condiciones de vida.
Ana teme que la búsqueda de su hijo se detenga con la serie de despidos que ha habido al interior de la Comisión Nacional de Búsqueda, desde hace un par de semanas. No es la única, Jorge Verástegui, que busca a su hermano y sobrino desaparecidos también teme lo mismo.
“Han comenzado a desmantelar la Comisión y hacia el final de este sexenio vemos cómo está en las ruinas y nos va a dar como resultado que no vamos a poder encontrar a nuestros familiares todavía. Por el amor que les tenemos vamos a seguir insistiendo”, dijo al respecto.
“El puesto les quedó muy grande, y mientras, nosotras como familias nos vamos a quedar a esperar a un nuevo gobierno que nos va a decir lo mismo, que son sensibles con nosotros y nuestra causa, pero cuando llegan al cargo se les va a olvidar”.
El temor no es casual
Al inicio de la administración, contó Verástegui, el trato era diferente, el presidente les recibió en varias ocasiones al interior de Palacio Nacional, les había prometido reuniones trimestrales y reconoció la deuda con esas familias como una de las más dolorosas herencias que se tenía de administraciones pasadas. A cinco años de gobierno la puerta está cerrada y quienes ocupan la Comisión de Búsqueda carece de los conocimientos para llevar a buen puerto la localización de personas desaparecidas.
“Hemos acudido ya a hacer varias acciones de búsqueda”, comentó durante el acto Sandino Rivero, abogado que ha acompañado a Ana Enamorado en su búsqueda. “La última iba a ser en octubre, en las Islas Marías, estaba pendiente pero por la temporada de huracanes se suspendió. Se iba a retomar en enero pero la comisionada Guadalupe Reyes no ha atendido a las solicitudes de una reunión para retomar la búsqueda”.
Durante el acto, los familiares de personas desaparecidas recriminaron los cambios en el censo de personas desaparecidas hechos públicos por el Gobierno Federal el pasado 14 de diciembre. Según este ajuste el Gobierno habría encontrado a más de 16 mil personas desaparecidas y descartaba las fichas de búsqueda de otros 62 mil registros (casi la mitad) porque se contaba con datos suficientes para continuar con la búsqueda.
“Me tomé el trabajo de buscar a mi hermano y a mi sobrino”, cuenta Jorge Verástegui sobre su experiencia con el registro.
“En el caso de mi hermano está confirmada su desaparición, pero en el de mi sobrino desconocen quién hizo el reporte de desaparición y dicen que no tienen contacto con quien lo reportó, cuando hemos realizado búsquedas en campo junto a la Comisión”.
El memorial se instaló alrededor de las 11 de la mañana y los actos de memoria a su alrededor se realizaron durante todo el día y hasta entrada la noche para asegurarse que nadie desapareciera el memorial. “Si usted retira el memorial, me está desapareciendo nuevamente a mi hijo, más le vale que lo cuide y que lo proteja a este mural ya que no protegieron a mi hijo para poder estarlo abrazando”, apuntó Ana Enamorado.
Jorge Verástegui la respaldó: “Desde 2022 han quitado y borrado las imágenes de nuestros familiares Pedimos se respete este acto de memoria, que no vaya a pasar lo que hicieron en la Glorieta de los Desaparecidos (antes de La Palma) que en la madrugada llegaron sujetos encapuchados a llevarse las fotos. El gobierno, hasta hoy no sabe dar razón de ello. Pedimos respeto. Estamos dispuestos a quitarlas cuando nos entreguen el paradero de nuestros familiares, porque no necesitamos estar haciendo manifestaciones, tomando espacios ni colocando fotografías”.
Aquí atrás está el busto de Samir. Y hoy Oscar Antonio López enamorado se une a este .
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Este trabajo fue publicado originalmente en Pie de Página que forma parte de la Alianza de Medios de la Red de Periodistas de a Pie. Aquí puedes consultar su publicación.