Después de 10 días de tocar puertas sin recibir respuesta, normalistas de Ayotzinapa derribaron una de las puertas de Palacio Nacional para reclamar una cita con el presidente López Obrador. Luego, familiares de estudiantes desaparecidos regresaron a Guerrero con una nueva promesa de un posible encuentro en unas semanas
Por Isabel Briseño y Kau Sirenio / Pie de Página
Fotografías: Isabel Briseño
Ciudad de México- Diez días permanecieron padres y madres de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa en plantón frente a Palacio Nacional esperando un diálogo con el presidente que no llegó.
El plan de las familias y normalistas rurales que llegaron a la Ciudad de México el 26 de febrero, era retirarse el día jueves 29 de marzo pero al no obtener respuesta a su solicitud de reunión con el Presidente Andrés Manuel López Obrador, determinaron quedarse.
Esta mañana, durante la conferencia presidencial, estudiantes de la escuela Normal Rural Isidro Burgos, intentaron abrir el paso a padres y madres de los normalistas desaparecidos para que entraran a la conferencia a hablar con el presidente. No lo lograron
“Han tratado de invisibilizar el movimiento de los padres y madres, pero aún así se mantuvieron y realizaron esta jornada”, dijo uno de los representantes de Tlachinollan.
Derriban la puerta y consiguen cita… en unas semanas
Alrededor de las 9 de la mañana, jóvenes con el rostro cubierto llegaron a la puerta 1 de Palacio Nacional que se ubica en la calle de Moneda. Los jóvenes chocaron una camioneta contra la puerta de madera e intentaron ingresar pero el personal de seguridad bloqueó el ingreso con gas lacrimógeno.
El presidente López Obrador había dicho los manifestantes serían atendidos por el subsecretario de Gobernación, Arturo Medina pero los familiares reclamaron que dicho encuentro sea con el mandatario, por lo que este miércoles, en su conferencia matutina, López Obrador dijo que dicho encuentro tendría lugar en unas semanas.
¿Qué piden?
Los asuntos que solicitan tratar los familiares en el documento entregado esta tarde son:
-La entrega de los 800 folios que el Ejército no ha entregado.
-Información sobre el posible traslado de 17 estudiantes de los separos de barandilla municipal a un lugar de las afueras de la ciudad de Iguala.
-La extradición de Tomás Zeron de Lucio prófugo en Israel
-La extradición de Jesús José Ulises Bernabé prófugo en los Estados Unidos de Norteamérica.
Confianza rota
Quedan tres meses del gobierno de Andrés Manuel López Obrador y poca confianza por parte de los familiares de los estudiantes desaparecidos de que se cumpla la promesa de encontrar a sus hijos.
Cristina Bautista Salvador, madre de Benjamin Ascencio Bautista uno de los 43 normalistas desaparecidos la noche el 26 de septiembre de 2014 señala que en su momento sintió mucha esperanza en el Presidente porque les prometió llegar a la verdad.
“Yo me imaginé como mucho dos años para que nos diera la verdad y dar con el paradero de nuestros hijos”, dice la mujer, que sostiene entre sus manos una lona con el rostro de su hijo.
Esa confianza en el presidente fue creciendo mientras avanzaban las investigaciones.
“Nos abrió las puertas, escuchó nuestras peticiones, pero siento que nada más lo hizo para calmarnos, para que no nos movilizáramos”, dice ahora la madre del estudiante desaparecido. Aunque también expresa su reconocimiento al trabajo que ha realizado López Obrador: “Se avanzó. Pero para nosotros como madres y padres no es suficiente con eso porque seguimos sin saber en dónde están nuestros hijos”.
“Sabemos que el gobierno actual no fue el responsable pero en sus manos está darnos la verdad porque es un crimen de Estado que se reconoció el 18 de agosto de 2022 y el Estado tiene que resolver el caso porque el presidente se comprometió cuando fuimos a verlo en Iguala, Guerrero”.
Bautista comparte que tanto ella, así como los demás padres y madres sintieron preocupación por el rumbo que tomaría la investigación luego de que el Presidente descalificó el trabajo del fiscal Omar Gómez Trejo y del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independiente (GIEI).
“Dice que son unos conservadores, que nos han manipulado y pues no, nosotros como madres y padres estamos agradecidos con ellos, porque gracias a ellos no nos pudo engañar el gobierno de Enrique Peña Nieto, no nos pudo entregar un cuerpo que no pertenecía a nuestros hijos cuando hicieron una búsqueda de simulación. Gracias a todo el equipo de defensores de derechos humanos como Tlachinollan de la Montaña, Centro Pro, Fundar y Serapaz, y a nosotros, que estamos de pie, no se cerró el caso Ayotzinapa.
“¿Por qué pedimos respuestas al Ejército? porque el Ejército manejó el C4, el Ejército monitorio a los estudiantes desde que salieron de la Normal de Ayotzinapa, por eso nuestra exigencia, además tenían infiltrados en la Normal, así que sabían todo el movimiento de la Normal de Ayotzinapa y el Gobierno sabía que en la Normal de Ayotzinapa se estaban concentrando las normales para la conmemoración del 2 de octubre”, insiste.
Mientras suenan las campanas de la catedral metropolitana que anuncian el mediodía, la madre realiza una reflexión:
“Digo yo, como campesina, cuando nosotros trabajamos sabemos quienes nos ayudan, entonces claro que ahí con ellos tienen que firmar para entrar a trabajar, entonces ellos sí saben quiénes estaban nada más que no nos quieren decir. Dirán que como somos campesinos no sabemos nada pero se equivocan, aquí seguimos de pie a nueve años y cinco meses que han pasado y no nos rendiremos hasta alcanzar la verdad, hasta alcanzar la justicia.
“Para nosotros esto es un desgaste”
Emiliano Navarrete padre del joven José Ángel Navarrete González lamenta que el Presidente actúe así.
“Al principio sí se tenía un poquito de confianza, no en una totalidad, pero sí teníamos la esperanza de que él pudiera darnos verdad y justicia”, dice.
El padre señala que durante un tiempo se trabajó bien hasta que se tocaron las líneas que llevan a la Secretaría de la Defensa Nacional.
“Es cuando vemos una postura directamente de él, como diciendo: para acá no. Se ve una resistencia ahí y por eso nuestra inconformidad porque sí vimos esa gran defensa hacia ellos. Ahí fuimos perdiendo la confianza”
Entonces ahí fue empezando el distanciamiento, que creció con la salida de Alejandro Encinas de la Comisión de la Verdad (Covaj) y la llegada de Félix Medina. El funcionario no daba respuesta a los acuerdos, dice el padre.
“Nosotros decidimos ya no tener más reuniones con el señor y solicitar una reunión con el señor Presidente, para qué es estar dialogando con una persona que no nos puede dar respuestas, por eso le pedimos que se hiciera a un lado”
“No existe manipulación, tampoco somos unos niños, sí sabemos lo que queremos y para nosotros ésto que él dice solo es desgaste”.
A la pregunta de cómo se siente su cuerpo, su corazón y su mente después de estos 9 años y cinco meses, explica:
“Tiene que florecer todo todo el amor que sientes por tu ser querido, para no dejarte caer, para no dejarte morir porque sabes que él te necesita (…) La herida sigue abierta y es duro, es duro saber que que el gobierno en lugar de ayudarte, primero te quiere ver tirado al piso para que le beses los pies, le lamas los zapatos y después apapacharte y darte media justicia. Entonces es muy difícil. La verdad, no le deseo esto que estamos pasando a ningún ser humano”.
10 días sin respuestas
Madres y padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa desparecidos el 26 de septiembre levantaron el plantón en el zócalo capitalino después de nueve días de protestas en las calles de la Ciudad de México; su pliego petitorio era una reunión con el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, pero esto no ocurrió.
El 26 de febrero instalaron el plantón en el Zócalo de la Ciudad de México con la única consigna: “hasta que haya respuesta del gobierno federal para que las investigaciones avancen y el Ejército mexicano entregue los 800 folios con información fundamental para el esclarecimiento del caso”.
Ese día las madres y padres de los 43 normalistas realizaron la marcha de 113 acción global, la protesta partió del Ángel de la Independencia y concluyó frente a Palacio Nacional; después del mitin, con el apoyo de organizaciones y normalistas de Ayotzinapa instalaron el campamento.
Con el grito “¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos!” y “¡26 de septiembre no se olvida, es de lucha combativa!”, comenzó la movilización, durante la cual algunos de los padres reconocieron que “cada vez está más lejana la posibilidad” de encontrar a sus hijos.
Días después, desde Israel, el extitular de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), Tomás Zerón, acusado por la justicia en México de tortura y desaparición forzada durante la investigación del caso de los 43 normalistas de Ayotzinapa, afirmó que el presidente Andrés Manuel López Obrador “lucra” políticamente con el caso e insistió en su inocencia.
Mientras Zerón de Lucio enviaba su mensaje político desde medio oriente los padres y madres de los normalistas protestaron frente a la Secretaría de Gobernación (Segob); sobre Bucareli, normalistas que acompaña a los familiares de los jóvenes realizaron pintas sobre el piso como “Ayotzi Vive. Los 43”.
En la fachada y el enrejado de la dependencia los manifestantes pegaron calcas con las siluetas del ex procurador Jesús Murillo Karam; el ex gobernador Ángel Aguirre; el ex secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong.
Con el himno Venceremos finalizó la protesta, pero un grupo de encapuchados lanzó petardos al interior de las instalaciones del Palacio de Covián.
En el tercer día de protesta las madres y padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa trasladaron su protesta en el Senado de la República los inconformes pedían una reunión los senadores Ricardo Monreal y Martha Lucía Micher pero los legisladores de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) no atendieron la petición. De acuerdo con reportes extraoficiales, este 28 de febrero personas encapuchadas lanzaron al menos cinco artefactos explosivos, uno de los cuales no detonó, por lo que personal especializado intervino para desactivarlo.
En la jornada de protesta “Contra el muro de la impunidad” padres y madres de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos en 2014, realizaron un mitin en la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), esto para pedir que la cancillería agilice la extradición de Tomás Zerón de Lucio a México para que enfrente la justicia mexicana.
El 1 de marzo, los manifestantes permanecieron en el plantón, ahí escucharon a la candidata presidencial por Morena, Claudia Sheinbaum Pardo, quien no hizo una sola mención sobre el caso Ayotzinapa, esto obligó a los padres y madres de los normalistas desparecido en Iguala a escalar la protesta.
Al día siguiente, las mamás y papás reunieron con organizaciones sociales y activistas que los han acompañado en estos nueve años y meses en demanda de presentación con vida de los 43 normalistas y castigos a los autores intelectuales y materiales.
El domingo, familiares de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa desparecidos en Iguala, marcharon con antorchas encendidas del Hemiciclo a Juárez al Zócalo capitalino la protesta de la jornada de lucha que realizan para que lo reciba el presidente Andrés Manuel López Obrador.
El lunes, acompañados de normalistas de Ayotzinapa y organizaciones sociales, las mamás y papás de los normalistas desaparecidos en 2014, se manifestaron en las afueras del Centro Federal de Arraigos de la Fiscalía General de la República en protesta por la lentitud de la investigación por la desaparición de los 43 normalistas.
El martes, familiares y amigos de los 43 normalistas desparecidos en Iguala realizaron mitin en el antimonumento +43, con la misma consigna, reunión el presidente Andrés Manuel López Obrador y presentación con vida y castigo a los culpables.
Regresan a Guerrero
Cerca de la una de la tarde y luego de que familiares y representantes legales explicaran lo sucedido en la mañana de este miércoles, indicaron que regresarían a Guerrero esperando que el mandatario mexicano cumpla con su mensaje enviado a través de la conferencia matutina de reunirse en dos semanas con los familiares.
“Es una posición política del Presidente frente al caso Ayotzinapa, está culpando a otros de su fracaso en la investigación, está culpando a otros del incumplimiento que hizo en sus compromisos de campaña. Él politizó el asunto”, dijo Vidulfo Rosales representante legal de los familiares.
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Este trabajo fue publicado originalmente en Pie de Página que forma parte de la Alianza de Medios de la Red de Periodistas de a Pie. Aquí puedes consultar su publicación.