El estado de Chihuahua figura en el lugar número once del país, de más a menos, en cuanto al porcentaje de la población con síntomas de depresión: un 16.4 por ciento de las personas chihuahuenses las presentan
Por Víctor M. Quintana S.
Ahora que repartimos deseos de felicidad a diestra y siniestra con motivo de año nuevo, es oportuno compartir una serie de datos que el día 14 de diciembre dio a conocer el INEGI. Se trata de la Encuesta Nacional de Bienestar Autorreportado (ENBIARE) 2021.
Bueno, es exagerado decir “qué tan felices”, pero la encuesta nos revela, al menos el estado de ánimo de las personas de toda la República. Como todos los que hace el INEGI es un estudio serio, que viene realizándose desde el año 2013 y que se actualiza cada año. Su propósito es formarse una visión del bienestar cuyo punto de partida es la perspectiva de la persona, vinculando distintas dimensiones de su vida y de su existencia social. Dicho más sencillamente, trata de conjugar cómo se sienten las personas y qué relación tiene ese sentimiento-percepción con el entorno en que viven. Este tipo de estudios se han ido haciendo más importantes, pues es muy claro que los puros datos “objetivos”, que prescinden de sentimientos y percepciones de la gente, no son suficientes para formarse una idea de cómo va un país.
Ya en concreto, en la ENBIARE 2021, el estado de Chihuahua figura en el lugar número once de más a menos en cuanto al porcentaje de la población con síntomas de depresión: un 16.4 por ciento de las personas chihuahuenses las presentan. Guerrero y Tabasco son las entidades con mayor porcentaje con 20.7 y 20.6 por ciento, respectivamente. En tanto, Quintana Roo y Sonora son las que presentan menores porcentajes, con 11.5 y 11.7 por ciento, respectivamente. El promedio nacional es de 15.4 por ciento.
Luego viene otro indicador: el nivel de ansiedad que padece la población. Aquí nos va mejor: ocupamos el lugar 25, con un 46.9 por ciento de la población que sufre algún grado de ansiedad, muy por debajo del promedio nacional, que es de 50.7 por ciento de la población. Aquí los estados que presentan más alto porcentaje son: Puebla y Chiapas con 57.8 y 56.8 por ciento, respectivamente. En el otro extremo, las entidades que reportan menos ansiedad son Baja California y Nuevo León, con 43.4 por ciento, cada uno.
En tercer lugar, la encuesta presenta lo que llama el “balance anímico” por entidad con base a cómo califican en una escala de uno a diez cómo se sintieron las personas el día anterior a la encuesta. A más cerca de diez, más positivo el sentimiento: aquí Chihuahua ocupa el lugar número nueve, con una calificación de 5.29, por encima del promedio nacional de 5.07. Las entidades con mejor calificación son Colima y Sonora, con 5-76 y 5.72, mientras que las peores calificaciones corresponden a Tabasco, con 4.43 y Puebla, con 4.49.
Finalmente viene la última escala: la satisfacción con la vida. En una escala de uno al 10, ¿qué tan satisfecha se siente la persona con su vida? Chihuahua ocupa un muy buen sexto lugar, con un 8.6, por encima del promedio nacional, de 8.45 por ciento. Los estados donde se percibe más satisfacción son Nuevo León y Colima, con 8.79 y 8.77, mientras aquellos donde la gente está menos satisfecha son la Ciudad de México y Puebla, con 8.15 y 8.16.
Luego volveremos sobre esta interesante encuesta. Por lo pronto es necesario mencionar dos cuestiones más: la primera es que en las cuatro escalas, está muy claro que los hombres tenemos menores índices de depresión y ansiedad y mejores índices de balance anímico y de satisfacción con la vida. Muy lógico estando en una sociedad tan sexista como la nuestra.
Lo otro es que, en general, tiene que ver mucho el nivel socioeconómico de la entidad federativa con el nivel de bienestar personal. En general, las entidades más desarrolladas, como son las de la Frontera Norte, más Baja California Sur, Sinaloa, Colima y Quintana Roo, presentan mejores índices que las entidades con más altos índices de pobreza, como son Guerrero, Chiapas, Oaxaca.
Cuáles son los factores para que las personas se sientan más bienestar y más satisfacción, lo analizaremos en una próxima entrega.
Ahora sí, Feliz Año Nuevo 2022.