El presidente mexicano respondió a las amenazas de Donald Trump de aumentar aranceles con una carta en la que lo invita a buscar alternativas a una guerra comercial. El canciller Marcelo Ebrard viaja este viernes a Washington
Texto: Daniela Pastrana
Pie de Página
Ciudad de México – El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, puso en jaque la relación comercial con México al amenazar con un arancel de 5 por ciento a todos los productos mexicanos a partir del 10 de junio si México no detiene la migración indocumentada.
En respuesta, el presidente Andrés Manuel López Obrador le envió una carta en la que le propone profundizar el diálogo para evitar una confrontación económica que perjudique a los dos países. “Estamos obligados a buscar soluciones pacíficas a las controversias”, dice la misiva.
También le recuerda que el gobierno mexicano está impulsando acciones para el desarrollo de Centroamérica y que ha cumplido con su responsabilidad de evitar el cruce por México “en la medida de lo posible y sin violentar los derechos humanos”. Pero aclara: “los problemas sociales no se resuelven con impuestos o medidas coercitivas”.
Apenas unas horas antes, en su conferencia matutina, López Obrador había anunciado la entrega del Tratado de Libre Comercio con Estado Unidos y Canadá (T-MEC) al Senado para su ratificación.
“Hay condiciones inmejorables para que se firme”, dijo el mandatario, en una conferencia en la que también participaron el canciller, Marcelo Ebrard, el subsecretario para América del Norte, Jesús Seade, la secretaria de Economía, Graciela Máquez, y el consejero jurídico de la presidencia, Julio Scherer.
Por la tarde, el consejero jurídico entregó el documento al Senado; los coordinadores de todos los partidos expresaron su apoyo a la negociación y anunciaron un periodo extraordinario de sesiones. El Consejo Coordinador Empresarial también celebró el inicio del proceso de ratificación del acuerdo comercial, que sustituirá al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
Pero dos horas después, el mandatario estadunidense anunció, vía Twitter: “El 10 de junio, los Estados Unidos impondrán un arancel de 5 % a todos los bienes que entran en nuestro país desde México, hasta el momento en que los migrantes ilegales que llegan a través de México”.
De acuerdo con Trump, el gobierno de López Obrador ha tenido “una cooperación pasiva” al permitir una incursión masiva de migrantes: “México tiene leyes de inmigración muy fuertes y podría detener fácilmente el flujo ilegal de migrantes, incluso devolviéndolos a sus países de origen. Además, México podría detener rápida y fácilmente a los extranjeros ilegales a través de su frontera sur con Guatemala”, dijo.
El anuncio provocó un alza del dólar del 2 por ciento; el subsecretario Jesús Seade aseguró que que la medida podría desatar una guerra comercial y que México “no se quedará con los brazos cruzados”. También dijo que si Estados Unidos cumple con la amenaza de imponer aranceles, el país responderá de forma energética y opinó que sería desastroso si se cumpliera la medida de Trump.
“Pareciera que Trump está haciendo -con sus acciones de hoy y la posible amenaza a #México mañana- hasta lo imposible por dinamitar las posibilidades de ratificación del #TMEC con los Demócratas y con México, para entonces así culpar a Pelosi cara al 2020”, escribió en su cuenta de Twitter, el embajador de México ante Estados Unidos de 2007 a 2013, Arturo Sarukhán.
En tanto, el canciller Marcelo Ebrard, quien este día viajará a Washington escribió tras difundirse la carta del presidente: “Magnífica respuesta de nuestro Presidente a las amenazas a México, orgullo trabajar en su gobierno, suscribo plenamente (…) Dignidad y firmeza en esta hora difícil”.
Las frases de la carta de Amlo, ‘en son de paz’
“Con todo respeto, aunque tiene el derecho soberano de expresarlo, el lema de ‘Estados Unidos primero’ es una falacia porque hasta el fin de los tiempos, incluso por encima de las fronteras nacionales, prevalecerán la justicia y la fraternidad universales”.
“Le propongo profundizar en el diálogo, buscar alternativas de fondo al problema migratorio y, por favor, recuerde que no me falta valor, que no soy cobarde ni timorato, sino que actúo por principios: creo en la política que, entre otras cosas, se inventó para evitar la confrontación y la guerra”.
“No creo en la Ley del Talión, en el ‘diente por diente’ ni en el ‘ojo por ojo’ porque, si a ésas vamos, todos nos quedaríamos chimuelos o tuertos”.
“Los pueblos y las naciones que representamos merecen que, ante cualquier conflicto en nuestras relaciones, por graves que sean, se recurra al diálogo, y actuemos con prudencia y responsabilidad”
“Desde el principio de mi gobierno le propuse optar por la cooperación para el desarrollo y ayudar a los países centroamericanos con inversiones productivas para crear empleos y resolver de fondo este penoso asunto. Usted sabe también que hemos cumplido con nuestra responsabilidad de evitar, en la medida de lo posible y sin violentar los derechos humanos, el paso por nuestro país”.
Carta Integra: