Ciudad Juárez, Chihuahua – El Centro de Derechos Humanos Paso del Norte (CDHPN) interpuso ante la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH) una queja por tortura cometida contra un detenido presuntamente por agentes ministeriales y denunció la inacción de la Fiscalía General del Estado de Chihuahua (FGE) en torno a este caso.
El organismo dio a conocer que los hechos se registraron el pasado 17 de mayo, cerca de las 14:00 horas, cuando dos de sus defensoras realizaban una diligencia en el edificio de la Fiscalía en Ciudad Juárez, ubicado en eje vial Juan Gabriel y calle Aserraderos, donde atestiguaron el presunto castigo físico y psicológico al que era sometido un detenido, al interior de las oficinas de la Unidad Antiextorsión.
En conferencia de prensa, encabezada por el sacerdote Oscar Enríquez Pérez, director del Centro, se dio a conocer que luego del incidente, se han enviado oficios a la oficina de la Fiscalía General de Justicia, a la oficina en Zona Norte, a la del Ejecutivo Estatal, de la Presidencia Municipal y de las Comisiones de regidores de Atención a los Derechos Humanos y Seguridad Públicos, para dar cuenta de los hechos denunciados.
Enríquez Pérez, quien estuvo acompañado por integrantes del Programa Compañeros y CASA Promoción Juvenil, reclamó por el nulo interés de la Fiscalía por esclarecer el caso y también que permitan esas prácticas a sus agentes.
Carlos Gutiérrez Casas, visitador general de la CEDH, quien estuvo presente en la conferencia, dijo que son principalmente elementos de la FGE quienes ejercen la tortura en Chihuahua.
Informó que durante la primera mitad de este año se han emitido 17 recomendaciones por actos de este tipo.
La acusación contra agentes ministeriales por la tortura a un detenido en las instalaciones de la Fiscalía en la zona norte fue difunda por La Verdad el pasado 25 de mayo, al día siguiente la dependencia investigadora aseguró que no hubo tortura.
En ese entonces, el Centro dio a conocer que sus derechohumanistas primero observaron cómo agentes ministeriales trasladaban violentamente a un detenido, luego escucharon gritos y llanto, además de golpes y amenazas con palabras altisonantes.
Ante los hechos, las defensoras confrontaron a los agentes por la violación de derechos humanos que estaban cometiendo en la Unidad Antiextorsión, pero éstos “de manera violenta” les respondieron que se retiraran ya que se encontraban en medio de una “investigación”, se narra en el escrito enviado a integrantes del Comité Contra la Tortura de las Naciones Unidas.
Tras el incidente, se informó, las defensoras acudieron a denunciar la situación a la Unidad de Control Interno, hasta donde dos agentes – no identificados – llegaron a confrontar a las mujeres.
“Los dos agentes que confrontaron a las integrantes irrumpieron en la oficina donde se encontraban, exigiéndoles que exhibieran la identificación que las acreditara como visitadoras de derechos humanos. Asimismo, las amenazaron con que podrían ser detenidas por obstruir la investigación, refiriendo que los hechos se relacionaban con el interrogatorio de un testigo protegido” se indica en la denuncia del organismo a la que tuvo acceso La Verdad.
Al día siguiente de la publicación , Alejandro Ruvalcaba Valadez, vocero de la corporación, dijo que en Asuntos Internos se levantó un acta de hechos por la denuncia, pero ahí vieron que la persona no estaba golpeada.
La versión oficial contrata con la denuncia presentada por el Centro de Derechos Humanos Paso del Norte.
El director del organismo defensor de los derechos humanos dijo que hay una falta de rendición de cuentas y nulo interés de la Fiscalía en el esclarecimiento de los casos atestiguados y denunciados por dos de sus derechohumanistas.
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