La sala cinematográfica operó en el mismo lugar donde se encontraba la casa de Inocente Ochoa, la misma que en su visita a la antigua Paso del Norte, encabezando la resistencia contra la invasión francesa, hospedó al entonces presidente de México Benito Pablo Juárez García
Juan de Dios Olivas
Apuntes Políticos
Ciudad Juárez –Localizado en la esquina de la avenida 16 de Septiembre y Francisco I. Madero, sobresale un viejo edificio en ruinas que ha logrado sobrevivir al paso del tiempo.
Aunque en su exterior muestra una remozada aplicada en el más reciente intento de preservarlo, su deterioro avanza a pasos agigantados y en su interior es notorio el abandono y vandalismo.
Se trata del que en su momento fue uno de los cines gigantes que en Ciudad Juárez que congregaban a las generaciones de fronterizos de antaño para disfrutar las películas del cine de oro mexicano así como las grandes producciones de Hollywood.
Lejos están los años en los que los juarenses hacían fila para entrar a su interior como aquel distante 29 de julio de 1945 cuando fue inaugurado después de dos años de estar en construcción que fue iniciada durante la gestión del presidente municipal Antonio J. Bermúdez.
La sala cinematográfica se ubicó justo en el mismo lugar donde se encontraba la casa de Inocente Ochoa, la misma que en su visita a la antigua Paso del Norte, encabezando la resistencia contra la invasión francesa, hospedó al presidente de México más venerado de todos los tiempos: Benito Pablo Juárez García.
Aunque la vivienda de Inocente Ochoa fue demolida, es por este hecho histórico por el que cobra relevancia además de la función cultural que tuvo durante más de medio siglo para el esparcimiento.
Su inauguración se dio a dos meses de haber concluida la Segunda Guerra Mundial que por la ubicación de Fort Bliss en El Paso, Texas y la participación de numerosos mexicanos en el ejército norteamericano, fue seguida muy de cerca por los fronterizos quienes convirtieron la apertura del cine en la segunda gran fiesta del momento.
Aquel día quienes asistieron pudieron presenciar la película norteamericana El Proscrito protagonizada por Jennifer Jones y Josep Cotten.
El desaparecido periodista e historiador David Pérez López, destaca en Los Años Vividos, Ciudad Juárez, Crónicas Pendientes que se trataba de algo digno de una ciudad moderna como Juárez.
En la reseña utilizada para publicitarlo e invitar a acudir a su inauguración que Pérez López rescata se asienta:
“Es una hermosa estructura en estilo colonial mexicano. Su vestíbulo e interiores han sido bellamente decorados con murales que representan diversos aspectos de la vida mexicana; uno de ellos muestra una danza yaqui, otro una danza oaxaqueña, y las demás escenas del Valle de México, el Castillo de Chapultepec, los canales de Xochimilco y el volcán Popocatépetl, todos ellos perfectamente admirables y dotados de iluminación indirecta”.
El nuevo cine contaba con aire acondicionado y calefacción, así como un amplio escenario para la presentación de variedades en vivo, con un aforo de 1700 personas.
Su pantalla de 10 metros de ancho era considerada de las más grandes del país y sus muros diseñados y construidos con la más avanzada tecnología en acústica, lo que lo hizo formar parte de las décadas de oro de Ciudad Juárez donde el turismo estadounidense y de todos lados acudía a esta frontera.
Aunque por décadas se exhibieron lo mejor del cine mexicano y cintas norteamericanas, al final de sus días su propósito inicial cambió para terminar exhibiendo pornografía, seguir en decadencia y finalmente cerrar sus puertas.
Así, tras 49 años de brindar entretenimiento, sus últimas películas fueron proyectadas el 7 de junio de 1994. Se trataba de las cintas de tercera Pensamientos Eróticos y Desnuda tras las rejas.
Después de ese año, durante más de 20 años gobiernos municipales y estatales han intentado rescatarlo y hasta convertirlo en la sede de la Cineteca Nacional en la frontera, pero todos han fracasado.
La Casa de Inocente
El Cine Victoria se encuentra justo en el lugar donde se encontraba la casa de Inocente Ochoa, el patriota que dio posada a Benito Juárez durante la invasión francesa en 1865,
Esa fue la primera ocasión en que la antigua Villa Paso del Norte fundada por Fray García de San Francisco en la época colonial recibió la visita de un presidente de México.
Juárez García llego encabezando la resistencia contra la invasión francesa, e hizo su entrada a la pequeña comunidad de entonces no más de 10 mil habitantes por el antiguo Camino Real (hoy calle Reforma), acompañado de un puñado de patriotas y soldados que escoltaban su carruaje.
El acontecimiento fue de tal magnitud que provocó algarabía entre los pobladores que acudieron a darle la bienvenida, mientras que todas las familias pudientes se disputaron el honor de recibirlo y darle albergue en sus hogares.
Sería Inocente Ochoa quien lo hospedaría en su casa que se ubicada en la actual avenida 16 de Septiembre y Francisco I. Madero, el inmueble que fue demolido y convertido en el Cine Victoria.
Su estancia se da entre el 14 de agosto y el 20 de noviembre de 1865, y de nuevo entre el 18 de diciembre y el 10 de junio de 1866. En este último periodo celebraría su cumpleaños número 60 arropado por los habitantes de esta región.
Su llegada a esta región marcaría el fin de su Gobierno itinerante y cambiaría para siempre el destino de la antigua Paso del Norte, que tiempo después, el 15 de septiembre de 1888, adoptaría en su honor el nombre de Ciudad Juárez.