La investigación sobre cómo se suscitaron los hechos que provocaron la muerte de Sandra y Francisco, así como de su bebé, aún continúa por personal de la Fiscalía de la Mujer
Por Blanca Carmona / La Verdad
Una sola arma de fuego y seis elementos balísticos fueron recuperados en la escena del crimen donde la pareja de policías, de Seguridad Pública y de Seguridad Vial, perdieron la vida y fue asesinada la hija de ambos de seis meses.
Los oficiales Sandra Guadalupe Rueda Pavía y Francisco de León De la Torre, así como la bebé recibieron los impactos de bala en el cráneo y la causa de muerte de los tres fue laceración encefálica, de acuerdo con los resultados de las necropsias de ley, informó la vocera de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Chihuahua, Sahira Castro.
La investigación sigue en manos de la Fiscalía Especializada de la Mujer (FEM) y aún no se establece cómo se suscitaron los hechos y la mecánica, se dio a conocer.
La portavoz dijo que en la casa donde se encontró el cuerpo de Francisco y lesionadas a Sandra y a la bebé, en la calle Nueva Zelanda, en la colonia Infonavit Oasis, se aseguró una pistola calibre .9 milímetros y los seis elementos balísticos (casquillos de bala).
“Al momento, la representación social mantiene la integración de todos elementos, datos e información para conocer el entorno inmediato de las víctimas y determinar lo que pudo ser el detonante del suceso. Se cuenta don diversas hipótesis, sin embargo, no se brindarán mayores detalles hasta tener todos los elementos de prueba”, indicó la portavoz.
El mismo día que sucedieron los hechos, este miércoles 16 de febrero, el titular de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal (SSPM), César Omar Muñoz Morales -quien durante varios años fue agente ministerial-, consideró que Sandra Guadalupe fue quien realizó los primeros disparos contra su pareja y su hija, y luego se suicidó. Además, precisó que ella tenía la portación de un arma calibre .9 milímetros propiedad de la Secretaría. Lo que podría robustecer la hipótesis de que se trató de un homicidio-suicidio.
El jefe policiaco explicó que su comentario se desprende de su propio análisis, por la posición de los cuerpos y las evidencias que observó en la escena del crimen.
Sin embargo, eso no ha sido confirmado por las autoridades investigadoras. En caso de que estas determinen que se trató de un homicidio-suicidio la carpeta de investigación será cerrada, pues no habría contra quien ejercer acción penal.
Solo si se determinara que un tercero puede ser el responsable, la investigación continuará, indicó un investigador de la FEM quien pidió la reserva de su identidad por no estar autorizado para hablar sobre el tema.
Los datos recabados el día de los hechos, señalan que la pareja de policías sostuvieron una discusión y después se mataron a balazos, y asesinaron a la hija de ambos.
Un llamado de auxilio se activó desde el radio matras que utilizan los agentes de seguridad para comunicarse, y al mismo tiempo todas las corporaciones policiacas recibieron la alerta. La solicitud de ayuda fue activada desde el domicilio de los agentes.
Minutos más tarde decenas de unidades de la SSPM, la Policía Estatal, Policía Ministerial Investigadora (PMI) y Guardia Nacional llegaron a esas calles y coparon unas dos cuadras.
Al ingresar a la casa, parte de los agentes que respondieron al llamado localizaron muerto al agente de la Coordinación General de Seguridad Vial, Francisco de León De la Torre, y con heridas a la agente de Seguridad Pública, Sandra Guadalupe Rueda Pavía, y a su hija.
Ellas dos fueron trasladadas al Hospital Star Médica, pero Sandra sufrió un paro fulminante cuando los médicos maniobraban en un intento por salvarle la vida tras el disparo que recibió en el cráneo. Minutos más tarde, la bebé también murió.
Francisco pertenecía a las filas de la Coordinación General de Seguridad Vial desde el 3 de septiembre del 2012 y Sandra Guadalupe Rueda Pavía se enlistó en la SSPM el 14 de noviembre del 2014, indican datos oficiales.
De acuerdo con registros de la Fiscalía de Chihuahua, de enero del 2014 a febrero 2021, unos 380 uniformados de las diversas corporaciones, de carácter municipal o estatal que hay en el estado, se vieron involucrados en el delito de violencia intrafamiliar.
Los datos oficiales exhiben también que al menos 33 policías estatales y municipales han sido imputados por cometer asesinatos en Chihuahua desde 2014 hasta febrero de 2021, según las cifras disponibles de la Dirección de Estadística Criminal de la Fiscalía.
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