No solo llama la atención que alguien como el presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, que se vanagloria cada que puede con banderas de independencia y autonomía, haya dilatado tanto tiempo en romper el silencio
Miguel Ángel Sosa
Twitter: @Mik3_Sosa
A propios y extraños sorprendió el presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación cuando, durante la presentación de su libro, de la nada sacó una historia tardía (tan solo trece años) de supuestas presiones que habría recibido en aquel entonces para dar carpetazo al caso de la Guardería ABC.
Al respecto, no solo llama la atención que alguien como él, que se vanagloria cada que puede con banderas de independencia y autonomía, haya dilatado tanto tiempo en romper el silencio, sino que además lo haga ahora con un claro objetivo de servir a los intereses del presidente López Obrador.
Vaya, hasta el propio coordinador de MORENA en el Senado, Ricardo Monreal, alzó la ceja ante los oportunistas y selectivos recuerdos de quien encabeza actualmente el Poder Judicial. Porque, aunque usted no lo crea, en México hay otros poderes además del Ejecutivo, aunque la realidad lamentablemente consigne otra cosa.
A modo y ocupando canales institucionales de la Corte, Zaldívar deslizó una versión sobre la tragedia ocurrida en Sonora con la que pretendió vestirse a sí mismo de héroe. Acusó supuestas presiones del gobierno federal encabezado por el entonces presidente Felipe Calderón, dichos señalamientos fueron inmediatamente desmentidos.
Margarita Zavala, primera dama durante la administración 2006-2012, contestó puntual: ¡Zaldívar miente! Y explicó punto por punto en qué consistían las falacias de un ministro al que por actos propios los mexicanos le perdieron la confianza desde hace tiempo.
Después de que la prensa diera larga difusión a las declaraciones de la ahora diputada Zavala, el ministro solo asomó la cabeza en una única entrevista. Ahí, no dijo nada revelador, siguió con la historia de cómo en su imaginación tiene la imagen de él mismo como caballero de la legalidad.
Por su parte, AMLO no salió de inmediato en defensa de Zaldívar, dejó que este navegara la tormenta solo: pasaron más de 24 horas antes de que el titular del Ejecutivo le prodigara un tenue cobijo al arlequín.
Varias voces señalaron que quizá el nuevo ataque contra la familia Calderón Zavala pudo haber sido a petición del presidente de México, pero sin tanto meditarlo fueron más los convencidos de que se trató de una ofrenda oficiosa de un subalterno al patrón.
ENTRETELONES
Lo bueno: Que México condene enérgicamente la invasión a Ucrania. Lo malo: Que el gobierno mexicano no haga lo mismo hacia adentro con el avance de los cárteles y la violencia que estos generan.