Migración

La Patrulla Fronteriza en El Paso se alista para suspender las expulsiones de migrantes




abril 23, 2022
Un migrante cruza a El Paso, Texas por el Río Bravo desde Ciudad Juárez. Enero 2022. Fotografía: Omar Órnelas / El Paso Times

A unos días de revocarse el Título 42, jefe de sector Gloria Chávez de La Patrulla Fronteriza en El Paso prepara a los agentes para volver al proceso de asilo

Por Lauren Villagran / El Paso Times

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El Paso, Texas–La Patrulla Fronteriza se prepara para el fin de una política de expulsiones inmediatas de migrantes conocida como Título 42, medida que aumenta las preocupaciones sobre los recursos necesarios para atender el repunte previsto en el tráfico de personas.

Las agencias de Estados Unidos involucradas en la seguridad fronteriza, la inmigración y la atención al refugiado, enfrentan una grave escasez de personal que podría complicar el cambio en la política, dijo la jefa de la Patrulla Fronteriza en el sector de El Paso, Gloria Chávez, a El Paso Times y a la Puente News Collaborative.

En El Paso, esta agencia ha visto reducir su personal a unos 2 mil 100 agentes, comparado con los 2 mil 400 que había hace dos años.

La capacidad de la Patrulla Fronteriza para enfrentar el incremento proyectado en la migración depende, en parte, en qué tan efectiva sea esta instancia, en conjunto con sus agencias asociadas, en procesar, transportar, detener, deportar o liberar a las personas, explicó Chávez.

El Centro de Procesamiento Central en el sector en El Paso, ubicado en Hondo Pass, en el noreste, tenía detenidos a más de 3 mil migrantes el lunes, casi dos veces más la capacidad del centro, incluyendo un anexo provisional.

Autobuses con migrantes llegan al Centro de Procesamiento Central de la Patrulla Fronteriza en el noreste de El Paso. 12 de marzo, 2021. Fotografía: Omar Órnelas / El Paso Times

El enfoque de Chávez es la logística: las comunicaciones, el transporte, coordinación entre agencias y organizaciones sin fines de lucro locales.

“Siento que nuestros agentes – siempre que les demos los recursos y las herramientas que requieren para hacer el trabajo, y lo equilibramos con un sistema de consecuencias que indique que sus esfuerzos no están subvalorados – vamos a salir adelante”, dijo.

Los Centros para el Control de las Enfermedades emitieron una notificación de salud pública, El Título 42, en marzo del 2020. La orden requería que los agentes fronterizos devolvieran inmediatamente a la mayoría de los migrantes a México o a su país de origen, para evitar detenerlos en centros de detención o de procesamiento para prevenir la propagación del COVID-19.

Los defensores de los inmigrantes lucharon contra la orden con decir que las deportaciones rápidas con frecuencia socavaban la vía legal para buscar asilo en EE. UU.

Cuando se acabe el Título 42, el 23 de mayo, la Patrulla Fronteriza volverá a procesar a los migrantes bajo el Título 8 del código de EE. UU., el cual rige el sistema migratorio.

Bajo el Título 8, algunos migrantes podrán ser elegibles para buscar asilo legalmente u otro esquema para inmigrantes, mientras que a otros los podrían procesar por la pena de entrar ilegalmente al país.  

“La potestad del Título 8 y el procesamiento nos van a volver a encaminar”, dijo Chávez. “Nos tomará un poco de tiempo ponernos al día. Pero allí llegaremos”.

Gloria Chávez, jefe de la Patrulla Fronteriza en el sector de El Paso, durante una entrevista en la sede de la agencia en El Paso, Texas, el 18 de agosto, 2022. Fotografía: Omar Órnelas / El Paso Times

Las preparaciones del sector de El Paso para volver al procesamiento del Título 8 incluyen:

  • Vacunar a los migrantes contra el COVID-19, en un programa voluntario que comenzó el 28 de marzo.
  • Construir un anexo junto al Centro de Procesamiento Central, con lo cual aumentaría la capacidad oficial de detención de mil 040 a mil 740 individuos.
  • Recibir a personal de asilo de los Servicios de Ciudadanía e Inmigración en el Centro de Procesamiento Central, para que ayude a coordinar las llamadas con los migrantes que buscan asilo
  • Poner en marcha el programa piloto ‘Sistema de Admisión de Casos’ en conjunto con el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas, para agilizar el transporte de migrantes a albergues locales o a los centros de detención.
  • Destinar a agentes de la Patrulla Fronteriza a las oficinas de la Fiscalía federal de EE. UU., para facilitar los procesos penales.

La pandemia del COVID-19 y el Título 42 practicamente suspendieron la actividad del sistema migratorio en Estados Unidos. Redujeron drásticamente el acceso legal hacia el asilo y frenaron lo que antes la Patrulla Fronteriza llamaba “sistema por consecuencia”, el enjuiciamiento de personas por delitos menores de entrada indocumentada o delitos graves, como el reingresos ilegales.

Al no haber curso de acción de parte del Congreso, le corresponde al gobierno de Biden determinar cómo se constituirá la inmigración y la aplicación de leyes migratorias en la frontera en la era postpandemia y posterior al Título 42.

El gobierno de Biden no ha indicado cómo que será el proceso a los que cruzan ilegalmente la frontera ni si hará deportaciones a los que tienen solicitudes de asilo rechazadas, mientras trabaja para restaurar las protecciones humanitarias perdidas bajo el Título 42.

 ‘Despliegue de opciones’ en la frontera

El Título 8 le concede a la Patrulla Fronteriza “un despliegue increíble de opciones” para vigilar la frontera, dijo Peter Hermansen, director jubilado de operaciones especiales de esta agencia. Sin embargo dijo, le preocupa que el gobierno de Biden no apoye la aplicación de las leyes y que Chávez, como los otros ocho jefes de sector de la patrulla fronteriza en el suroeste, “va a tener un conflicto moral en sus manos”.

“¿Cuáles van a ser las disposiciones que vamos a aplicar? ¿A quién se las vamos a aplicar? ¿Y quién nos va a apoyar en la aplicación de dichas disposiciones?” preguntó Hermansen. “No creo que exista el apoyo porque ya se ve una falta de apoyo”.

Hubo una reducción del 38 por ciento en el procesamiento de delitos federales en enero, en comparación con el mismo mes hace cinco años y reducido en un 9 por ciento comparado con el año pasado, de acuerdo con el Transactional Record Access Clearinghouse (TRAC) una organización de la Universidad de Syracusa que reúne información migratoria.

“El enjuiciamientos por cargos de ingreso ilegal – que por lo general comprende la gran mayoría de los casos en los tribunales federales –tocaron fondo por completo y no se han recuperado”, dijo Austin Kocher, profesor asistente del Syracuse University.

Migrantes son expulsados a México custodiados por agentes de la Patrulla Fronteriza, por el Puente Internacional Paso del Norte. Fotografía: Omar Órnelas / El Paso Times

Hubo solamente 24 casos de primer cruce ilegal en septiembre del 2021, comparado con más de ocho mil en septiembre del 2018, de acuerdo con el TRAC. Los casos por reingresos ilegales fueron más de mil en septiembre 2021, casi una tercera parte de los casos mensuales antes de la pandemia.

“(Eso) se debe en un 100% al Título 42”, explicó. “Todos los que hubieran sido procesados simplemente han sido rechazados. No tengo duda en que esas cifras de procesos federales vuelvan a disparse”.

Un ‘sistema de asilo sensato’

Los defensores de los migrantes, quienes pidieron eliminar al Título 42, han cambiado el enfoque para defender el tratamiento humanitario de los solicitantes de asilo que están en custodia provisional de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos.

“En realidad, la parte más importante es restaurar el derecho a buscar asilo y un proceso transparente para los que buscan asilo”, dijo Marisa Limón García, subdirectora de Hope Border Institute en El Paso, quien ha compartido sus inquietudes con Chávez y otras autoridades locales.

En marzo, el gobierno de Biden reformuló el proceso para que los migrantes solicitarán legalmente el asilo en la frontera del suroeste.  Son los agentes del Servicio de Ciudadanía e Inmigración los que decidirán los casos, en lugar de los jueces de inmigración.

Cuando una persona cruza la frontera y declara un temor a persecución o a tortura – y aprueba una evaluación formal de “miedo creíble” ante la Patrulla Fronteriza – será referida a un agente de asilo y se le dará libertad. En vez de esperar dos años para ver a un juez de inmigración, en el saturado sistema judicial de inmigración, los que buscan asilo tendrán una decisión sobre sus casos en cuestión de meses, de acuerdo con información del Departamento de Seguridad Nacional.

La acumulación de casos en la corte de inmigración era 1.5 millones de casos en enero del 2022, e incluía más de 238 mil casos que empezaron con una entrevista de “miedo creíble”, de acuerdo con la Oficina Ejecutiva de Revisión de Inmigración (EOIR, por sus siglas en inglés), la dependencia que maneja el sistema de las cortes de inmigración.

Muchos de los solicitantes no califican para el asilo bajo las leyes de EE. UU., las cuales requieren probar la persecución por motivos de raza, religión, nacionalidad, pertenencencia a un grupo social en particular o por opinión política. La solicitud de asilo ha sido una de las pocas vías legales para entrar al país, por no haber aumentado el número de visas laborales y otras.

En el 2019, los jueces de inmigración concedieron el asilo en el 20 o 30 por ciento de los casos, este año solo a 20 mil 126 de los 67 mil 958 casos presentados. La posibilidad de aprobación de un caso aumenta considerablemente al contar con un abogado.

El gobierno de Biden reconoció que el Servicio de Ciudadanía e Inmigración no cuenta con el personal para cumplir con la necesidad anticipada, que es de hasta 75 mil casos al año. La agencia ha calculado que tendrá que contratar a unos 800 nuevos empleados y gastar aproximadamente 180 millones de dólares para implementar de lleno el nuevo proceso de asilo.

Es dudoso que esto se logre antes del 23 de mayo.

“Con esta regla, estamos fomentando un sistema de asilo más operativo y sensato para asegurar que aquellos que califican reciban protección más rápidamente, mientras que los que no califican queden deportados con rapidez”, dijo en una declaración el secretario de Homeland Security, Alejandro Mayorkas.

La tarea de la Patrulla Fronteriza es arrancar el proceso: recibir a los que buscan asilo, transportarlos al Centro de Procesamiento Central, y registrar sus datos antes de entregarlos a ICE o a un albergue sin fines de lucro, como la Annunciation House en El Paso.

“Los hemos animado a pensar específicamente en la atención a las personas en el Centro de Procesamiento Central”, dijo Limón García. “Han respondido positivamente a esto. Están obrando por responder a la política cambiante. Tenemos que pensar críticamente en los recursos”.

Encuentros con migrantes al alza

Chávez – una veterana con 27 años en la Patrulla Fronteriza que encabeza a más de 2 mil 100 agentes que vigilan más de 430 kilómetros (268 millas) de la frontera entre Estados Unidos y México – no quiso dar un estimado de lo que podrían ser los flujos migratorios cuando se acabe el Título 42. Lo que sí dijo es que han aumentado los encuentros con migrantes a cerca de 900 al día en abril, comparado con unos 600 al día en marzo y unos 300 al día, en enero.

“Los números no mienten”, dijo el representante republicano Tony Gonzales (R por San Antonio), cuyo distrito se extiende desde El Paso hasta Del Río, Texas. “Cuando observas los números, es astronómico. Todos estos sectores narran una historia similar y los recursos no corresponden con lo requerido. Es allí cuando ves que muchas agencias están agobiadas”.

Un documento filtrado de una proyección del Departamento de Seguridad Nacional y publicado por Breitbart News, cuyos datos también se proporcionaron a periodistas de Axios en marzo, describe un plan de contingencia frente a una “llegada masiva”, definida por el documento como más de 5 mil personas que llegan en un día a cualquiera de los nueve sectores de la patrulla fronteriza en el suroeste.

De acuerdo con patrones del pasado, la combinación de las personas que llegan podría cambiar dramáticamente, tal vez desde adultos solos intentando evadir los agentes fronterizos hasta a familias que buscan asilo. También podrían cambiar los requerimientos de recursos de la patrulla fronteriza – incluyendo el número de agentes, coordinadores para procesar a los individuos, instalaciones de detención provisionales y opciones de transporte.

La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza reportó más de un millón de encuentros en la frontera suroeste entre octubre pasado y finales de marzo, un aumento del 85 por ciento comparado con los más de 570 mil encuentros registrados durante el mismo periodo el año pasado. En El Paso, los encuentros subieron un 58 por ciento, a 113 mil 281 en el mismo periodo de seis meses, comparado con 71 mil 810 durante ese periodo hace un año.

“Es una situación insostenible y los retos se ponen más difíciles”, dijo representante demócrata de El Paso, Verónica Escobar.

“El Congreso debe tomar alguna acción”, dijo. “En lo que vamos reduciendo las vías legales, no nos debería sorprender que vemos un incremento en la migración irregular. El Congreso no ha tomado acción alguna para expandir el número de visas; hemos limitado la posibilidad de asilo; ni siquiera hemos apoyado el procesamiento de visas dentro del país. Tenemos que restaurar las vías legales que han sido eliminadas o bloqueadas”.

La expulsión inmediatamente bajo el Título 42 animó a algunos migrantes – mayormente adultos solos – a cruzar y esquivar una y otra vez a los agentes fronterizos. No había consecuencia por este acto, a diferencia de como se manejó antes de la pandemia, cuando cruzar ilegalmente con frecuencia desencadenaba un proceso penal y encarcelamiento.

La reincidencia, definida como el porcentaje de individuos aprehendidos más de una vez por la patrulla fronteriza dentro de un año fiscal, aumentó al 27 por en el año fiscal 2022 comparado con el 7 por en el año fiscal 2019, el último año fiscal completo antes de implementarse el Título 42, según la Patrulla Fronteriza.

Sin embargo, antes de la implementación del Título 42, la mayoría de los que llegaban a la frontera suroeste eran padres de familia que viajaban con hijos y que activamente buscaban encontrar a los agentes fronterizos para entregarse, muchos con la esperanza de buscar asilo.

En marzo, el sector de El Paso fue el quinto más ocupado, después de los sectores del Río Grande Valley, Del Río, Yuma y Tucson.

Las comunicaciones y los coordinadores

Ante la próxima revocación del Título 42, Chávez se enfoca en prevenir los cuellos de botella que podría dejar hacinados los centros de detención de la Patrulla Fronteriza.

El año pasado el sector de El Paso inició un sistema piloto que automatiza las comunicaciones con ICE, agencia que normalmente transporta a los migrantes de la custodia de la patrulla fronteriza a los albergues sin fines de lucro, a centros de detención o a lugares desde los que se devuelve a los migrantes a su país natal.

Anteriormente, los agentes de la patrulla fronteriza levantarían el teléfono para llamar a ICE tras procesar a un grupo de migrantes; algunas de esas solicitudes quedarían perdidas y los migrantes podrían permanecer por periodos más largos bajo custodia de la agencia. Ahora, dijo Chávez, los agentes de la Patrulla Fronteriza en El Paso registran las solicitudes digitalmente en un “sistema de admisión de casos” y de inmediato ICE programa recoger a los migrantes.

A veces, cuando quedaban perdidas las solicitudes, “las horas se volvían días”, dijo Chávez, “y después comenzarían los señalamientos acusatorios”.

“Ahora todo es electrónico”, afirmó.

El sector también cuenta ahora con 95 nuevos coordinadores de procesamientos en el Centro de Procesamiento Central, un puesto creado en el 2021 para personas de la población civil. Las responsabilidades de este puesto incluyen recibir a los que buscan asilo, manejar su documentación, atender su bienestar mientras están bajo la custodia de CBP. Hay 13 coordinadores más asignados a El Paso que están participando en una academia que dura siete semanas, dijo Chávez.

Para adelantarse a lo que ella supone será un embotellamiento en cuanto al transporte, Chávez dijo que los agentes de la patrulla fronteriza en El Paso se valen de un programa que les permite recibir una licencia de conducir de transportes comerciales. Para finales de mayo, Chávez anticipa que habrá 51 agentes del sector certificados con estas licencias.

“Nos hace falta más transporte”, dijo. “Nos hace falta tener más conductores habilitados y más vehículos para transportar a las personas desde la frontera hasta el Centro de Procesamiento Central, y del mismo a donde se disponga”.

En cuanto al único agente de asilo del Servicio de Ciudadanía e Inmigración asignado al Centro de Procesamiento Central, Chávez indicó que quisiera poder invitar a 25 agentes.

“Por lo menos ahora tengo a una persona que me asesora”, dijo. “Es una de las solicitudes que hemos presentado como sector junto con otros jefes de la frontera del sur. Hemos aprendido que nos es de gran ayuda tener con nosotros agentes de asilo desde el principio del proceso. Entonces, hay que continuar con fomentar eso”.

Comuníquese con Lauren Villagran en lvillagran@elpasotimes.com

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Este contenido fue producida como parte de Puente News Collaborative, una asociación binacional de organizaciones de noticias en Ciudad Juárez y El Paso, de la que forma parte La Verdad.

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