El reporte de la Organización Meteorológica Mundial prevé para 2022 una mayor probabilidad de condiciones más secas en el suroeste de Europa y el suroeste de América del Norte, y una mayor pluviosidad en el norte de Europa, el noreste de Brasil y Australia
Por Inter Press Service
Ginebra – El calentamiento de la Tierra continúa y hay 93 por ciento de probabilidades de que uno de los años entre 2022 y 2026 se convierta en el más cálido jamás registrado, indicó este martes 10 de marzo un reporte de la Organización Meteorológica Mundial (OMM).
«Mientras no cesen las emisiones de gases de efecto invernadero, las temperaturas seguirán aumentando”, señaló el secretario general de la OMM, Petteri Taalas, al presentar el informe en esta ciudad suiza.
En paralelo, “los océanos seguirán calentándose y volviéndose más ácidos, el hielo marino y los glaciares seguirán derritiéndose, el nivel del mar seguirá subiendo y las condiciones meteorológicas serán cada vez más extremas”, dijo Taalas.
Según el estudio, hay 50 por ciento de probabilidades de que, por lo menos en uno de los próximos cinco años, la temperatura media anual del planeta supere transitoriamente en 1.5 grados centígrados los niveles preindustriales, el límite inferior del Acuerdo de París sobre el Cambio Climático.
Ese acuerdo de 2015 comprometió a la casi totalidad de los países a trabajar para limitar las emisiones de gases que calientan la atmósfera, y así la temperatura global no supere 1.5 grados centígrados sobre los niveles de la era preindustrial (antes de 1900) hacia el año 2050, ni más de dos grados a finales de siglo.
Las probabilidades de que el calentamiento global superara la marca de 1.5 grados eran casi nulas en 2015, pero desde entonces no han dejado de aumentar. Para el período comprendido entre 2017 y 2021 se calcularon en 10 por ciento, mientras que para para el período de 2022 a 2026 ese porcentaje llega hasta casi 50 por ciento.
“Este umbral de 1.5 grados centígrados no es una cifra aleatoria, sino que indica el punto en el que los efectos del clima serán cada vez más perjudiciales no solo para las personas, sino para todo el planeta”, destacó Taalas.
Según el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) un calentamiento global de 1.5 grados centígrados agravará los riesgos relacionados con el clima a los que están actualmente expuestos los sistemas naturales y humanos.
La OMM también señala que hay 93 por ciento de probabilidades de que al menos uno de los años del período comprendido entre 2022 y 2026 se convierta en el más cálido jamás registrado y desbanque del primer puesto a 2016, cuando la temperatura media del planeta se elevó 1.2 grados centígrados sobre los niveles preindustriales.
Ese nivel promedio para el período 1850-1900 se calcula en 13.7 grados centígrados.
Según el Boletín sobre el clima mundial anual a decenal de la OMM, la probabilidad de que la media quinquenal del período 2022-2026 sea superior a la media de los últimos cinco años (2017-2021) también es de 93 por ciento, y para cada uno de los años del el alza se prevé entre 1.1 y 1.7 grados centígrados.
“Si un año del periodo 2022-2026 se superara ese valor de 1.5 grados centígrados, se evidenciaría que nos acercamos cada vez más a una situación en la que ese límite se podría sobrepasar durante un lapso prolongado”, explicó Leon Hermanson, experto de la Oficina Meteorológica del Reino Unido que ha elaborado el informe.
En 2021, la temperatura media mundial se situó 1.1 grados centígrados por encima de los niveles preindustriales de referencia, según la versión provisional del informe de la OMM cuya versión definitiva se publicará el 18 de mayo.
Los episodios consecutivos de La Niña de principios y finales de 2021 conllevaron una reducción de las temperaturas mundiales, pero ese efecto de enfriamiento es solo provisional y no invierte la tendencia de calentamiento global a largo plazo.
La Niña es un fenómeno climático caracterizado por un régimen de vientos alisios fuertes desde el oeste del océano Pacífico, debido a lo cual las temperaturas ecuatoriales disminuyen.
Pero si se instaura un episodio de El Niño (fenómeno opuesto a La Niña) provocaría un repunte inmediato de las temperaturas, como ya ocurrió en 2016.
Taalas también dijo que “el calentamiento es desmesuradamente más acusado en el Ártico y lo que ocurre en esa región nos afecta a todos”.
En comparación con la media de 1991 a 2020, se prevé que la anomalía de temperatura en el Ártico sea más del triple que la anomalía media mundial.
El reporte de la OMM además prevé para 2022 una mayor probabilidad de condiciones más secas en el suroeste de Europa y el suroeste de América del Norte, y una mayor pluviosidad en el norte de Europa, el Sahel (franja semiárida que atraviesa el centro-norte de África), el noreste de Brasil y Australia.
Para el período de noviembre a marzo entre 2022-2023 y 2026-2027 habrá más lluvias en los trópicos y una reducción en las zonas subtropicales, condiciones congruentes con los efectos previstos del calentamiento del clima.
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Este trabajo fue publicado originalmente en Inter Press Service. Lo reproducimos con su autorización. Puedes consultar la versión original aquí.