El 77 por ciento de los mexicanos apoya el manejo oficial contra la pandemia de COVID-19, revela una encuesta de Parametría. Es una evaluación positiva al gobierno federal y de paso al principal responsable de la estrategia, el subsecretario Hugo López-Gatell
Por Alberto Najar
Twitter: @anajarnajar
Después del presidente Andrés Manuel López Obrador, el funcionario público más injustamente atacado en la historia reciente es el doctor Hugo López-Gatell.
Casi desde el inicio de la pandemia de la COVID-19 el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud ha enfrentado una intensa campaña de vilezas, agresiones, manipulación, mentiras y ataques personales.
La causa real del linchamiento fue su papel en contra de la invasión de comida chatarra en el país, así como su activismo para prohibir la comercialización de cigarros electrónicos, entre otros elementos.
La fachada de los ataques, sin embargo, fue la estrategia nacional de salud para contener la pandemia de COVID-19, que el doctor López-Gatell encabezaba.
Los promotores del odio nunca tuvieron el valor de admitir la verdadera razón de su rabiosa campaña.
Hipócritamente se escudaron en una supuesta preocupación por el incremento de los contagios durante los picos de la pandemia.
Festejaron los incrementos de contagios y aplaudieron la muerte de cientos de personas.
Mintieron sobre la cantidad de las vacunas adquiridas y se esforzaron por convencer a incautos de la supuesta falta de eficiencia de algunas dosis como Sputnik o Cancino.
El propósito era esparcir miedo en una sociedad de por sí aterrorizada por el efecto del virus SARS Cov2 en los mexicanos, vulnerables por los altos índices de obesidad y padecimientos crónicos.
La idea fue generar desconfianza en el gobierno de la 4T para minar su respaldo, y esperar la cosecha de votos que, estaban convencidos, les llegaría en abundancia.
La campaña de odio se dirigió contra la estrategia sanitaria del gobierno federal, pero se concentró especialmente en la figura de López-Gatell.
Al paso de los meses quedó claro el fracaso de los promotores del odio la violencia. La oposición, por ejemplo, perdió la mayoría de las elecciones.
Tampoco logró abatir el respaldo a López Obrador, que sigue con niveles de popularidad de 60 por ciento en promedio.
Aún más: la prolongada estrategia descalificación contra la estrategia oficial contra la pandemia no resultó a los opositores.
Una encuesta de la empresa de opinión pública Parametría revela que el 77 por ciento de los mexicanos cree que el gobierno de López Obrador ha manejado bien, o muy bien, la pandemia de COVID-19.
El 74 por ciento de los encuestados califica positivamente el trabajo de la Secretaría de Salud. Los gobernadores también son bien evaluados: obtienen 71 puntos en el sondeo.
Parametría ha hecho esta medición desde marzo de 2020, cuando empezó la Jornada Nacional de Sana Distancia y con ello el confinamiento obligado de la población.
En ese entonces el 57 por ciento cuestionó la estrategia contra la pandemia. Los números se mantuvieron en niveles similares durante casi un año.
Pero a partir de abril de 2021 empezaron a repuntar. Por esos días el país aún resentía el efecto de la segunda ola de contagios, que resultó más mortífera que la primera.
La encuesta no mide a personajes en específico, sino que se refiere a la forma como los distintos gobiernos enfrentaron la emergencia sanitaria.
Pero por parte de la Secretaría de Salud federal la mayor responsabilidad recayó en López-Gatell. El sondeo, pues, resultaría también una evaluación a su trabajo.
Hay más. Los números de la encuesta son, en los hechos, una fuerte derrota de los propagadores de odio.
Es positivo que reciban una cachetada de realidad y no por la evaluación a la estrategia oficial contra la pandemia, sino porque muestran a un país que difícilmente se deja engañar.
También evidencia que la mayoría de los mexicanos pueden distinguir entre la propaganda de las acciones que pueden salvar su vida.
Representa, desde luego, una lección. Hasta ahora lo único que ha logrado articular a los opositores de la 4T es el discurso de odio y violencia.
No tienen más, es su única arma política. Y si ésta no les funciona pues enfrentan un reto más complicado en su anhelo de recuperar el poder que les arrebataron en 2018.
***
Alberto Najar. Productor para México y Centroamérica de la cadena británica BBC World Service. Periodista especializado en cobertura de temas sociales como narcotráfico, migración y trata de personas. Editor de En el Camino y presidente de la Red de Periodistas de a Pie.