Opinión

La Exequia de Doña Pompa, una obra de Alan Escalona




diciembre 6, 2022

Alan Escalona da vida a una ficción escenificada de elementos mágicos, esotéricos y eróticos, haciendo uso de la comicidad negra y de la tragedia. Una propuesta atractiva para el teatro mexicano contemporáneo.

Por Évolet Aceves
Twitter: @EvoletAceves
Instagram: @evolet.aceves

Alan Escalona es un joven dramaturgo, uno de los tres ganadores de la convocatoria del año pasado impulsada por el Foro Shakespeare: Historias de motel para dramaturgias de paso, y autor de la obra teatral La Exequia de Doña Pompa,la cual se presentó a mediados de 2022 en dicho foro, y vuelve a presentarse en el mismo sitio hasta el 16 de diciembre. Las próximas funciones son los días 4, 9, 11 y 16 de diciembre.

El término exequia —una palabra en desuso y que el dramaturgo revive, al igual que a sus personajes— hace referencia a una ceremonia fúnebre, a la despedida de un ser que ha partido del mundo terrenal y que se celebra de diferentes formas, dependiendo de las costumbres de quienes la practican.

La Exequia de Doña Pompa está bajo la dirección de Isael Almanza, teniendo como elenco a Erandeni Durán y Miguel Narro, mientras el vestuario está a cargo de Andrea Lumbreras.

La escenografía fue la misma para todas las obras ganadoras, una escenografía acogedora para montar un cuarto de motel, la cual consta de paredes de tapiz, una cama matrimonial, un cuadro de flores colgado arriba de la cama, un tocador, una lámpara y una puerta que simula ser la puerta hacia el baño.

El vestuario fue correctamente seleccionado para remontar a la audiencia a la mitad del siglo XX, Erandeni Durán, vestida en tonos fucsia, lleva una falda a la rodilla y una gabardina, con un suéter de cuello frondoso ceñido al cuerpo, rematado su atuendo con un peinado abultado y aretes cortos y notorios; mientras Miguel Narro porta un pantalón de casimir y una playera pegada, de las que solían usar en aquellos tiempos. El calzado de ambos también fue seleccionado de acuerdo con la ambientación temporal.

Alan Escalona, a través de esta tragicomedia en un acto, escenifica la historia de una mujer, Doña Pompa, interpretada por Erandeni Durán, que acude a la habitación en donde tuvo el primer encuentro íntimo con su difunto esposo, quien realiza frecuentes visitas en sueños vueltos pesadilla. Doña Pompa pretende resucitar a su esposo muerto siguiendo las indicaciones de una bruja o hechicera o alguien que tiene contacto con los seres del más allá, para aclarar finalmente los motivos de las repetidas y agobiantes visitas oníricas de su amado, que no dejan a Doña Pompa encontrar sosiego.

Doña Pompa, atormentada, tiene como propósito acudir a este cuarto de hotel para revivir a su amado y poder enfrentarlo. Coloca su ropa sobre la cama y comienza el ritual. A través de un adecuado uso de recursos esotéricos, como lo son el humo, las veladoras y una iluminación tenue, tras decir un conjuro, el cual es un poema de Alejandra Pizarnik, y que denota los intereses literarios y estéticos del dramaturgo, aparece, desnudo y de espaldas, con excelente manejo de iluminación, el novio recién regresado del mundo de los muertos, interpretado por el también joven actor Miguel Narro. Su aparición es encantadora, el manejo de su cuerpo pareciera danzar con la oscuridad y la timidez de las luces, que intermitentemente se asoman mientras él permanece desnudo sobre el escenario, segundos erotizantes, de una hegemonía masculina hechizante que ofrece este personaje.

Una serie de diálogos cómicos y trágicos toman lugar entre los dos protagonistas a partir de la aparición. El dominio de la voz de Erandeni resalta, hace sentir la vivencia de sus penas, de sus inquietudes amorosas, así como la proyección de su experiencia y comodidad en el escenario. Una actriz profesional que sabe dar cada paso y medir cada decibel de su voz.

La Exequia de Doña Pompa es la primera obra de teatro de Alan Escalona, y para ser una primera obra, ha tenido la dicha de tener resultados exitosos, con filas de un público que llena el escenario para ver esta pieza teatral dinámica y entretenida. Una obra de teatro bien hecha.

Alan Escalona da vida a una ficción escenificada de elementos mágicos, esotéricos y eróticos, haciendo uso de la comicidad negra y de la tragedia. Una propuesta atractiva para el teatro mexicano contemporáneo.

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Évolet Aceves escribe poesía, cuento, novela, ensayo, crónica y textos híbridos. Psicóloga, fotógrafa y periodista cultural. Estudió en México y Polonia. Ha colaborado en revistas y suplementos culturales, como: Pie de Página, Nexos, Replicante, La Lengua de Sor Juana, Praxis, La Libreta de Irma, El Cultural (La Razón), Revista Este País, entre otros. Fue galardonada en el Certamen de ensayo Jesús Reyes Heroles (Universidad Veracruzana y Revista Praxis, 2021). Ha realizado dos exposiciones fotográficas individuales: México Seductor (2015) y Anacronismo de la Cotidianeidad (2017). Ha trabajado en Capgemini, Amazon y actualmente en Microsoft. Esteta y transfeminista.

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