Maru Campos, destructora del municipalismo
domingo, septiembre 3, 2023
A los municipios medianos y pequeños en Chihuahua se les está privando de su fuerza pública porque ha entrado en complicidades con la delincuencia organizada. La solución que han encontrado es intervenir para suplantar, más que para fortalecer los cuerpos preventivos con un programa de fondo que permita que la seguridad se garantice desde el lugar mismo de la base social
Por Jaime García Chávez
En el PAN de Chihuahua sí niegan la cruz de la propia parroquia. Recuerdo que el padre fundador, Manuel Gómez Morín, alentó un renacimiento democrático apoyado en el municipalismo, que hoy pasa de largo en las convicciones de quienes han dirigido el estado, lo mismo Francisco Barrio que Javier Corral y el presente sexenio.
El PAN ha tenido que morder su lengua. De aquellos “místicos de la democracia”, cuando el poder llegó en no pocos espacios de la república, continuaron gobernando como lo había hecho el PRI, con todas sus inercias, corruptelas y faltas de responsabilidad.
Todo lo que entrañaba un golpe de timón para fortalecer la vida municipal, quedó en los sueños del fundador, y en su lugar se instaló el modus operandi del viejo autoritarismo centralista y depredador de la institución municipal.
El artículo 115 constitucional dispone muy claramente el campo de acción del municipio y sus potencialidades en materia de seguridad preventiva, cuando realmente se respeta su autonomía y se fortalece el profesionalismo con el que deben atenderse las agendas más cercanas a la sociedad que se dan en las cabeceras, pueblos y rancherías.
Ahora todo esto se ha traducido en una cara destrucción de la institución. Lo estamos padeciendo, y a un altísimo costo, en el tratamiento que se da a municipios medianos y pequeños a los que se les está privando de su fuerza pública porque ha entrado en complicidades con la delincuencia organizada. La solución que han encontrado aquí en la capital Chihuahua es intervenir para suplantar, más que para fortalecer los cuerpos preventivos con un programa de fondo que permita que la seguridad se garantice desde el lugar mismo de la base social.
Aquí tenemos, recientemente, el largo listado de municipios que carecen hasta de lo más estricto en esta materia; la noticia es recurrente de que llegan las policías estatales a imponer su presencia y a acrecentar el malestar y la violencia misma en las regiones, sobre todo serranas, por donde transita todo tipo de droga hacia sus zonas de destino comercial, no sin desatender lo que podríamos llamar el mercado interno.
A ese paso el municipio terminará cediendo todo lo que la Constitución le reserva, y se confirma esto con la noticia de que la gobernadora reunió a los alcaldes del estado para anunciar una “nueva estrategia de comunicación”. No se necesita ser un sabio para entender esto como el recibir instrucciones en tiempo electoral.
Y dentro de todo esto, quiero llamar la atención del gran déficit que en materia de seguridad ha acompañado al gobierno actual desde su inicio.
Al inaugurarse la actual administración, se entregó tanto la Fiscalía General del Estado como la Secretaría de Seguridad Pública, a dos ineptos que al paso del tiempo evidenciaron no estar capacitados para la tarea. Tan es así que Roberto Fierro Duarte fue defenestrado por la propia gobernadora, quien no ha dado el paso subsecuente a hacer lo propio con Gilberto Loya, que carga en su haber un descrédito grande en las corporaciones que están a su mando.
Con relación a este último, las estadísticas lo hunden, pero todo se hace más evidente cuando se quiere presentar ante la sociedad con una energía enorme, pero para desarmar a la policía de municipios como los de Nuevo Casas Grandes y Janos y hacerse cargo él de la situación, informando que recién se habían descubierto irregularidades que en esas comunidades son prácticamente del dominio público.
Todo pareciera indicar que mantener en el cargo a Gilberto Loya sólo se explica por el negocio que entraña la construcción de la Torre Centinela en Ciudad Juárez, y la muy vulnerable plataforma del mismo nombre, que ha sido objeto de ataques que evidencian que el trabajo de seguridad no se está haciendo con inteligencia.
Tengo para mi que Gilberto Loya debe ser destituido de su cargo y abandonar todas las políticas destructoras del municipalismo, porque si esto no se empieza a corregir desde ahora, llegará al momento en que todos los municipios se deformen por inútiles, para dar paso a que el centralismo presidencial también concluya con la idea de que las entidades tampoco sirven, y que hay que ponernos en manos de una militarización sin límites, que además ha resultado incapaz para abatir los índices de sangre y violencia que nos ha dejado el crimen organizado, que actúa en el país y crece en el mundo entero.
31 agosto 2023
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Jaime García Chávez. Político y abogado chihuahuense. Por más de cuarenta años ha dirigido un despacho de abogados que defiende los derechos humanos y laborales. Impulsor del combate a la corrupción política. Fundador y actual presidente de Unión Ciudadana, A.C.
