Fotografías: Rey R. Jauregui / La Verdad
Tras varios días de permanecer suplicando que los dejaran entrar a Estados Unidos, decenas de migrantes lograron burlar el alambre de púas, que instaló el gobierno de Texas en su frontera con Ciudad Juárez, para entregarse a agentes de la Patrulla Fronteriza, por el sector de El Paso, Texas.
Unas 300 personas en movilidad, entre hombres, mujeres, algunas con bebés o niños pequeños, adolescentes y familias, pudieron pasar la barrera instalada por la Guardia Nacional de Texas, a la altura del marcador número 36 del muro fronterizo. Todos ellos llevaban días concentrados en ese lugar a la intemperie.
Este jueves 21 de marzo lograron derrumbar el alumbrado y seguir su camino. Atrás dejaron a los elementos de la Guardia Nacional de Texas que durante días frenó su paso.