Chihuahua, Chih. –El gobernador Javier Corral ha negado en varias ocasiones que Miroslava Breach le confió que había recibido amenazas por sus publicaciones y, en conferencia de prensa, este miércoles llamó mentirosas a las hermanas de la periodista por lo que presuntamente éstas declararon durante el juicio oral que él tenía conocimiento de ello.
Sin embargo, el 23 de marzo de 2017, horas después del crimen, Corral Jurado convocó a una rueda de prensa en la que hizo referencia a su amistad con Breach Velducea e informó que él mismo había escrito una columna en la que advertía que se encontraba en riesgo por sus investigaciones periodísticas.
En una primera parte, el panista aseguró que Miroslava no le había hablado de amenazas recientes, pero reveló que dos años atrás, cuando él era senador de la república, platicaron al respecto y hasta le hizo recomendaciones para protegerse.
A continuación, compartimos la transcripción de la primera parte de la rueda de prensa en donde reconoce que la periodista se encontraba en riesgo:
“No teníamos ninguna información sobre amenazas. Debo decir que yo tenía una comunicación frecuente, periódica, directa con Miroslava y a mí nunca me expresó que hubiera recibido amenazas.
Hace dos años, sí, ella me mostró mucha preocupación por mensajes y amenazas que se le estaban haciendo llegar con motivo de la publicación de reportajes que todos conocemos que ella publicó junto con otra periodista de Chihuahua y que frontalmente tocaron estructuras del crimen organizado de Chihuahua.
Y en aquella ocasión platicamos cuando yo era senador de la República. Ella estaba preocupada, yo mismo le hice unos consejos. Ahora como gobernador, de una manera coloquial y directa, yo le preguntaba cómo estás, como vas y nunca me expresó Miros que tuviera alguna amenaza o alguna advertencia.
Ahora que estuve con su familia (…) estuve con Rosy, su hermana y sus demás familiares, me expresaron que Miroslva estaba recibiendo mensajes, que estaba recibiendo…. Que había recibido mensajes.
También el fiscal platicó hace algunos meses con ella y Miroslava sobre cuestiones de carácter informativo y Miroslava nunca le expresó, hasta donde me ha expresado el fiscal, una preocupación por una amenaza directa.
Pero es evidente que su trabajo periodístico se constituye como la principal línea de investigación. Y su trabajo periodístico acumulado. Miroslava denunció frontalmente a bandas del crimen organizado, como actos de corrupción en el estado de Chihuahua y ese trabajo, es por ahora, nuestra principal línea de investigación.
Minutos después, otro periodista abordó al gobernador sobre el tema de las amenazas:
Reportero: Sabemos esa relación estrecha que no es de una década o dos, Miroslava y usted se conocen de añales (…) ¿declarará el gobernador en torno al caso formalmente?, porque sabemos también que existía esa comunicación directa y estrecha entre usted y ella. Y si usted establece que, en su momento, en el ejercicio periodístico de años atrás, ella le confió el peligro que existía, suponemos que tiene algún sospechoso…
Gobernador: No tengo ningún sospechoso
R: No sabe usted entonces ¿Era amigo o no era amigo Miroslava?
G: Eso no significa…
R: Por eso, pero si en esas fechas tenía comunicación con ella y que le haya confiado que estaba en riesgo y que de buenas a primeras llega con la familia y entonces sí…
G: Una de las cuestiones que yo le pregunté a Rosy inmediatamente, su hermana, es si Miroslava había recibido amenazas y con sorpresa me enteré de que estaba siendo molestada. Y lo primero que pregunté fue porque Miroslava no me lo quiso confiar, no me lo dijo y ella me dijo lo mismo.
Me dice ella que le platicó Miroslava y que le dijo ‘oye, platícale al gobernador, Javier es tu amigo’ y realmente no me había confiado, este, absolutamente ningún acto de molestia propiamente dicho
R: ¿Recientemente?
G: Recientemente
R ¿Pero hace dos años sí?
Hace dos años todos supimos del reportaje y me refiero al artículo que publiqué. Yo publiqué un artículo hace dos años pidiéndole al gremio que estuvieran atentos del trabajo que estaban realizando Miroslava y Patricia Mayorga. Eso está escrito, no fue una confidencia de amigos, llamé la atención de esos reportajes y escribí que era muy importante estar atentos porque estas periodistas podrían correr peligro, riesgos en un ambiente, como sabemos, tan contaminado. Tampoco éramos confidentes.
Rueda de prensa encabezada por el gobernador Javier Corral el 23 de marzo del 2017, con motivo del asesinato de la periodista Miroslava Breach.
La investigación a la que hace referencia el gobernador, fue titulada Impone el crimen organizado candidatos a ediles en Chihuahua y publicada el cuatro de marzo de 2016 y no en 2015 como lo estima Corral en la rueda de prensa.
El reportaje salió en vísperas del proceso electoral en el que el panista contendería por la gubernatura de Chihuahua, y se ha convertido en la clave para demostrar que el móvil del crimen fue su trabajo periodístico.
Otra muestra de que el gobernador conocía la situación fue expuesta en la investigación del Colectivo 23 de Marzo, el cual documentó una captura de pantalla de una conversación vía Whatsapp entre Miroslava y una colega, con fecha del 12 de agosto de 2016.
“Me llamó Corral el viernes pasado, en muy buena postura frente al tema que hablamos. Dijo que no me preocupara, que él tomaría cartas en el asunto con el alcalde de Chínipas”, escribió Miroslava la conversación.
Su interlocutora le respondió: “Qué bueno. Que calmen el tema en lo político”
“No sé si lo haga”, respondió Miroslava, “pero al menos se mostró sensible, hace la diferencia”.
“No hizo nada para protegerla”
El gobernador Javier Corral tenía conocimiento de las amenazas en contra de la periodista Miroslava Breach Velducea, y no hizo nada para protegerla. No es sólo la versión de las hermanas, sino de otros testigos que fueron parte de la carpeta de investigación de la Fiscalía General del Estado (FGE), refirió Balbina Flores, representante de Reporteros Sin Fronteras (RSF) en México.
“Desde un principio, y no solo ellas, sino otros testigos, señalaron a varios implicados y por otra parte también se sabe que desde un inicio el gobernador sabía de amenazas previas hacia Miroslava. Él tenía conocimiento”, dijo Flores este miércoles al finalizar el tercer día de juicio oral en contra de Juan Carlos M. O., único procesado penalmente por el homicidio de la corresponsal de La Jornada, ocurrido el 23 de marzo del 2017.
Los comentarios los hizo a pregunta expresa de medios de comunicación luego de las declaraciones del gobernador en el sentido de que eran mentira los testimonios de las hermanas de la periodista, quienes ante el estrado dijeron que Corral sabía de las amenazas contra Miroslava y nunca hizo nada.
“Han ido hacia una evolución hacia lo peor ellas. Lamento la actitud que tomaron…Están mintiendo con todas sus letras”, fueron las palabras de Corral al ser interrogado por reporteros este miércoles después de un evento público en la ciudad de Chihuahua.
La representante se RSF manifestó que Corral no tiene por qué hacer ese tipo de expresiones en estos momentos, “ellas (hermanas) son víctimas y tienen derecho a hablar”. Afirmó que las hermanas han sido respetuosas y se han conducido así hacia el mandatario, “en este comentario su actitud (Corral) no ha sido respetuosa al hacer un señalamiento de este tipo”.
El mandatario presumió que la Fiscalía General del Estado realizó un trabajo con profesionalismo al indagar el caso de Miroslava, “a ver, la Fiscalía hizo tal trabajo que es la base del juicio. Lo que se está llevando a cabo es de la Fiscalía General del Estado”, resaltó.
Además, lanzó una pregunta retórica cuando se le preguntó si Miroslava habría mentido al señalar como “mensajeros del narco”, según testimoniales, a funcionarios y políticos panistas que le hacían llegar amenazas tras sus reportajes.
“Eso lo tendrá que aclarar el MP, ¿por qué lo tengo que aclarar yo?”. Previamente dijo “cualquier cosa adicional, imputación, señalamiento en la investigación ha habido tiempo necesario y suficiente para clarificar, para llamar a cualquier actor y quitarle este oportunismo”.
Incluso aseguró que después de que el caso salió de la esfera de lo estatal “se acabaron las protestas y exigencias, y ya no hubo el fervor con el que se exigía justicia”. “A mí me puede mucho cuando estos casos terminan siendo usados para el golpeteo político y no para la justicia”.