El Centro, Felipe Ángeles, Melchor Ocampo, Azteca, Revolución Mexicana, Riberas del Bravo y Parajes de San Isidro se identifican como las zonas donde se concentra más este delito en Ciudad Juárez
Fernando Aguilar
La Verdad/Especial para El Diario
Ciudad Juárez –Una mañana Isabel llegó como de costumbre a la casa de la calle Noche Triste donde almacena las cosas que vende, solo para encontrar que la puerta principal había sido forzada, presume, la madrugada anterior.
Al haber vivido ya un robo previo, la comerciante, una mujer de 39 años, supuso que desconocidos habían irrumpido para llevarse la mercancía, pero, cuenta, lo que vio apenas entró fue una escena mucho más indignante.
“¡Los ladrones ahí dejaron todo lo sucio y se pusieron lo nuevo!”, recuerda con ironía. “Encontré calcetines sucios y el calzoncillo que traía el malandro. Agarraron las camisetas de tirantes y sacaron la que se iban a poner, los calcetines que se iban a poner y la trusa que se iban a poner. Se llevaron bocinas, televisiones, trastes, sartenes”.
El hurto ocurrió durante el 2018 en el Centro, un asentamiento que, según un análisis espacial realizado por La Verdad, se localiza en uno de los tres sectores geográficos de la ciudad más impactados por el robo a casa habitación con y sin violencia en los últimos cinco años: el poniente, el norponiente y el suroriente.
Situadas en dichas zonas, otras colonias que son focos rojos en el tema del robo a viviendas son Felipe Ángeles, Melchor Ocampo, Azteca, Revolución Mexicana, Riberas del Bravo y Parajes de San Isidro, exhiben los datos.
Un hecho paradójico es que cuatro de ellas están a un kilómetro de distancia o menos de la estación de policía más cercana, establece este ejercicio hecho con datos que la Fiscalía General del Estado (FGE) proporcionó mediante la solicitud de transparencia 033432019.
El Centro, por ejemplo, se encuentra a menos de 600 metros de la estación homónima; Melchor Ocampo y Azteca se hallan a menos de 900 metros de la Estación Universidad, y la colonia Revolución Mexicana está a tan sólo 136 metros aproximadamente de la Estación Poniente.
El análisis espacial muestra que el sector poniente-norponiente se caracteriza por agrupar en sus proximidades colonias donde se perpetraron, al menos, entre 16 y 110 robos de 2014 a 2018.
Esto resulta evidente sobre todo en las que se ubican hacia el oeste del eje vial Juan Gabriel, tales como México 68, (48 robos); Independencia II (36), Revolución Mexicana (82), División del Norte (55), Granjas de Chapultepec (39) y Oasis Revolución (43).
Lo mismo ocurre en las inmediaciones de la zona Centro, donde se encuentran colonias como Hidalgo, que suma 45; El Barreal, que acumula 37; Partido Romero, donde sucedieron 51, y Chaveña, en la que hubo 55.
Este panorama contrasta con lo que se observa en otras localizaciones de la ciudad como el nororiente y el oriente, donde el número de robos a casa habitación con y sin violencia, que equivalen a número de carpetas de investigación iniciadas en la FGE, es mucho más bajo.
Por ejemplo, de las siguientes colonias ubicadas en el oriente de Ciudad Juárez, en Satélite hubo 34; en Fidel Ávila, 11; en Lucio Cabañas, cuatro; y en Valle Verde, ocho, según los datos que proporcionó la Fiscalía.
Consultado para conocer una postura oficial sobre qué hacen las autoridades preventivas para combatir el problema, Arturo Sandoval Figón, portavoz de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal (SSPM), comenta que la Policía Municipal ha venido fortaleciendo sus patrullajes preventivos para brindar mayor seguridad a la población.
“Sin duda se ha trabajado en delitos de alto impacto haciendo detenciones de bandas que afectan el patrimonio de los juarenses, como es el robo a casa habitación y el robo a transeúnte”, dice el vocero. “Día a día o cada mes se presentan las detenciones”.
Para Isabel Sánchez Quirarte, coordinadora en turno de la Mesa de Seguridad y Justicia de Ciudad Juárez, los hurtos cometidos por bandas dedicadas enteramente a esta actividad son el mayor problema en este tema.
“Es un problema que estamos visualizando; sobre todo hay un problema de casas abandonadas que se están robando y, hablando con la Fiscalía, se ha puesto especial atención en las bandas que hacen el robo a casa habitación con violencia, porque esas son las que más hacen daño en percepción de inseguridad con toda la comunidad”, afirma.
El pasado 11 de octubre, la SSPM informó en un comunicado de prensa sobre la detención de dos integrantes de una banda de personas dedicadas al robo a casa habitación con violencia.
La corporación municipal dio a conocer en aquel momento que este grupo de presuntos asaltantes de casas realizaban estas actividades en el suroriente de la ciudad, en los fraccionamientos Jardines de Roma, Senderos de San Isidro y Misiones de Creel.
El hecho de que esta banda fuera detenida por la policía en ese sector parece no ser una casualidad, muestra el análisis espacial.
Como el poniente y el norponiente, la zona periurbana suroriente de Ciudad Juárez es un tercer foco rojo en los delitos de robos a casa habitación con y sin violencia.
La espacialización de los datos estadísticos provistos por la FGE expone que, con 70 y 99, respectivamente, Riberas del Bravo y Parajes de San Isidro encabezan el listado de colonias de esta parte de la ciudad donde con mayor frecuencia ocurrieron hurtos entre 2014 y 2018.
En esta zona periurbana suroriente, otras colonias como Parajes de Oriente, con 53; Portal del Roble, con 36; Praderas del Sol, con 38 y Parajes del Sur, con 62 casos acumulados, son puntos que no se mantienen ajenos a la problemática.
Paulina, quien por motivos de seguridad pidió omitir sus apellidos, vivía en el fraccionamiento Parajes del Sur hasta octubre de este año, cuando un robo a casa habitación les quitó a ella y a su esposo la relativa calma de la que gozaban en esa vivienda de renta.
Ella relata que los ladrones, quienes supone eran unos menores de edad a los que ya había visto anteriormente, entraron por la parte trasera de la casa ubicada en la calle Tres Arroyos mientras la pareja estaba trabajando.
“Fue entre semana. Abrieron la puerta. Tuvieron el tiempo suficiente para registrar toda la casa. Solo se llevaron cosas pequeñas, fáciles de sacar. Nosotros llegamos en la noche y nos dimos cuenta. Dejaron las puertas de atrás abiertas”, cuenta la mujer de 28 años.
Tras experimentar el horror de llegar a casa y observar que se habían llevado entre otras cosas una laptop, zapatos y cierta cantidad de dinero en efectivo, dice la mujer, la pareja decidió buscar otro lugar dónde vivir con todo el sacrificio que para los dos ello implicó.
“Nuestra rutina de vida cambió desde el momento en que nos tuvimos que cambiar de domicilio. La distancia en comparación con el otro domicilio hacia el trabajo es mayor. Tenemos que levantarnos más temprano. La renta es más elevada. Tenemos que considerar un gasto mayor”, lamenta.
laverdadjz@gmail.com