Opinión

Si Juárez hablara, en mi opinión, estos serían sus propósitos de Año Nuevo



martes, enero 23, 2024

Para el 2024 ya no deseo más reuniones de coordinación en las que solo se reporten
los hechos como se reporta el clima. No quiero más informes triunfalistas, ni aplausos, ni
aplaudidores. No quiero más violencias, ni impunidad

Por Diana Chavarri

Si Juárez hablara, estos nos diría:

Estamos abriendo otro año, hace casi dos meses cumplí 363 años. Aún así, soy una ciudad
joven, aunque crecí demasiado rápido. Al igual que quienes me habitan, yo también quiero vivir el año 2024 con propósitos nuevos. Quiero ser una ciudad llena de vida, saludable, limpia, ordenada, vibrante y atractiva para todos y todas.

Hoy sostengo la vida y creo procurar el bienestar de más de un millón y medio de personas. Se estima, además, que la población en movilidad asciende a 8 mil personas que buscan en mí un lugar de paso para cumplir el sueño americano. Creo que he sido injusta, negligente y abusiva con ellas. No he sabido armonizar mis distintas voces y activar mis recursos para acoger y garantizar los derechos de las personas de otras nacionalidades que hacen uso de su derecho de libre tránsito y llegan a mi territorio para ser aceptados en mi vecino país.

Deseo para el 2024 que las personas en movilidad dejen de ser víctimas de múltiples delitos y vejaciones; que se les deje de ver como criminales; que las instituciones responsables de su situación asuman la responsabilidad que les corresponde y destinen mayores y mejores recursos humanos, técnicos, jurídicos y materiales para que sus derechos sean garantizados; quiero que las voces de quienes encabezan los gobiernos y agrupaciones empresariales expongan un discurso coherente y justo en torno a las personas en movilidad y que toda la ciudadanía sepa darles acogida y oportunidades. Mostremos de lo que estamos hechos o ¿ya lo estamos mostrando?

Otra vez me encuentro en el top 10 de las ciudades con más homicidios en el mundo. En mi memoria reciente, hemos estado ahí por unos 7 años consecutivos. En mi territorio ocurren miles de asesinatos y desapariciones sin resolver relacionadas con el crimen organizado y con la violencia en contra de las mujeres. Los niveles de impunidad son rampantes. Me resisto a normalizar la violencia y el delito y me preocupa que mis habitantes ya se han acostumbrado a vivir así.

Para el 2024 ya no deseo más reuniones de coordinación en las que solo se reporten los hechos como se reporta el clima. No quiero más informes triunfalistas, ni aplausos, ni aplaudidores. No quiero más violencias, ni impunidad. Me propongo contar con una comprensión profunda y sistémica de las problemáticas para que, entonces, pueda atender las causas raíz.

No soy ingenua, se que las transformaciones en materia de seguridad y justicia tomarán décadas, pero deseo que se desarraiguen las violencias desde la sociedad misma desde sus mismas dinámicas cotidianas. Le apuesto a un sistema de Justicia Cívica bien implementado; lo estoy estrenando y me propongo mejorarlo. Me he propuesto que las Instituciones de Seguridad y Justicia inviertan más y mejor, no solo en fierros (tecnología, equipamiento, edificios, etc.), sino en su recurso más preciado: sus policías, peritos, fiscales, jueces, defensores, magistrados, contralores. Quiero también inversión en el fortalecimiento de sus sistemas, procesos y protocolos.

Me propongo ser más segura. Deseo que ninguna persona que pise mi tierra se sienta insegura, ni tenga miedo, ni sospeche que el de al lado pueda estar cargado de drogas, armas o dinero de procedencia ilícita. Quiero que nadie sufra robos, que ninguna mujer sea víctima de violencia de género, que ningún joven sea estigmatizado; que a nadie le maten a su hijo o hija. Que se acceda a la justicia. Que se ejerza el Estado de Derecho.

Entre mis propósitos del 2024 se encuentra hacer una prevención social de la violencia y delincuencia en serio, con inyección importante de recursos concurrentes de los gobiernos y de la mano de organizaciones de la sociedad civil, la ciudadanía y la cooperación internacional, identificando los factores de riesgo y protección de mis habitantes con mayor propensión a ser víctimas o victimarios y echando mano de las mejores prácticas documentadas en la materia.

Me propongo también cuidarme más, embellecerme más, ser más ordenada, arreglar mis calles, banquetas, camellones y parques. Deseo ser bella, admirada y dignificada. Quiero arraigo de mi gente, sus respetos y cuidados.

Me propongo apoyar más a mis artistas, a mis intelectuales, a mis deportistas, a mis estudiantes, a mis emprendedores, a la clase trabajadora, a las personas más vulnerables.

Deseo un hogar y un entorno digno y vibrante para cada niño y niña que toque mi tierra. Quiero para el 2024 una economía sólida, empresas incluyentes, éticas, innovadoras y versátiles. Deseo que sean un medio para el desarrollo y bienestar de mis habitantes. Y dejo al final el propósito más importante: que quienes me habitan sean personas enteras, hechas de buena madera, congruentes, íntegras, compasivas y constructoras de un mejor Juárez.

***

Diana E. Chávarri Cazaurang. Profesional que se ha desempeñado durante trece años como
fundadora, consejera, directora y voluntaria de diversas organizaciones de la sociedad civil
mexicanas especializadas en seguridad, justicia, empleabilidad de jóvenes en situación de
riesgo, salud, desarrollo local, filantropía estratégica y fortalecimiento del tercer sector.

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