El Instituto Estatal Electoral aprobó a ocho agrupaciones para que desde ahora y hasta enero de 2023 realicen asambleas constitutivas con el fin de afiliar ciudadanos y lograr el registro como partido político estatal; ¿quienes son?
Itzel Ramírez / La Verdad
Con miras a recibir dinero público a partir de 2023 y participar en las elecciones locales, exmilitantes del Partido Revolucionario Institucional (PRI), exlegisladores y excandidatos por la vía independiente buscan durante este año crear nuevos partidos políticos.
El Instituto Estatal Electoral aprobó a ocho agrupaciones para que desde ahora y hasta enero de 2023 realicen asambleas constitutivas con el fin de afiliar ciudadanos y lograr el registro como partido político estatal.
Misael Máynez Cano -exdiputado local por el extinto Partido Encuentro Social y excandidato a la alcaldía de Juárez por el también desaparecido partido Redes Sociales Progresistas-, es el representante de la Agrupación Política Estatal Chihuahua Líder, que busca convertirse en el partido Movimiento No Más Políticos.
Como legislador, Máynez Cano perdió el control de su bancada, que terminó deshaciéndose ante la renuncia al grupo parlamentario de cuatro de sus cinco integrantes. Posteriormente, y ya firmada su agrupación, el diputado solicitó licencia para buscar una candidatura en el proceso electoral 2020-2021, primero como aspirante a gobernador por el Partido Verde -candidatura que no se concretó-, y luego por RSP a la presidencia municipal fronteriza.
Otra exmilitante del PES, un partido de origen cristiano, que busca una nueva oportunidad en la política es la exregidora de Chihuahua Martha Elena Vega Pereyra, representante de la agrupación Ciudadanos por constituirse en partido Encuentro Solidario Chihuahua AC.
Detrás de la agrupación Vía Democrática Activa de Chihuahua AC, que busca conformar el partido Vía Democrática Activa VIDA, está Abraham Montes Alvarado, exdiputado federal por el PRI en la LXIII Legislatura (2015-2018) y fue integrante de la dirigencia local de la Confederación Nacional Campesina, uno de los sectores del PRI.
Heliodoro Emiliano Araiza Reyes, antiguo priista y funcionario cercano al expresidente municipal de Chihuahua, Marco Quezada, es el representante de la agrupaciónTrabajando por Chihuahua, que pretende conformar el partido Trabajando por Chihuahua.
Igualmente de origen priista están Marisa Hernández Porras, representante de Movimiento Laborista Chihuahua AC, que pretende conformar el Partido Movimiento Laborista Chihuahua. De acuerdo con los registros públicos, Hernández Porras fue en octubre del año pasado aspirante a consejera del Consejo Político Municipal del PRI de Chihuahua y pertenecía a la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos, otra de las organizaciones sectoriales del PRI.
Completan el grupo de expriistas Israel Espinoza Armendáriz, quien en 2017 estaba todavía afiliado al Revolucionario Institucional, según consta en documentos del partido. Espinoza es el representante de Cohesión Ciudadana, agrupación que buscará conformar el partido México Republicano.
Daniel Ernesto Quezada Mendoza quiso en 2018 ser candidato independiente a diputado local, pero no reunió requisitos de apoyo ciudadano, por lo que no obtuvo la postulación. Ahora, es el representante de la agrupación Asociación Un siglo con el pueblo AC, que aspira a conformar el partido Pueblo.
Por último está la Asociación por la Justicia y la Igualdad en Chihuahua, para conformar el partido Chihuahua Somos Todos, con Jesús Alberto Medina Ramírez como representante.
En el camino quedaron las agrupaciones Revolución Ecológica AC, para conformar el partido Ciudadanos Unidos y Futuro Por Chihuahua, para conformar el partido Futuro Por Chihuahua, que no cumplieron con los requisitos para seguir con el proceso.
A través de un comunicado, el IEE informó que las asambleas constitutivas deberán abarcar cuando menos 45 municipios en caso de asambleas electorales municipales o 15 distritos cuando se trate de asambleas electorales distritales.
“El número de personas afiliadas en las asambleas, no podrá ser menor del 0.26 por ciento del padrón electoral del distrito, municipio o demarcación, según sea el caso”, informó el IEE.
Celebradas las asambleas, la organización deberá presentar su documentación ante el IEE (incluida la comprobación de gastos, aunque sean de recursos de origen privado), para que en febrero de 2023 el IEE se manifieste sobre la procedencia de los registros como nuevos partidos políticos.
En el boletín, el instituto informó que será una aplicación desarrollada por el Instituto Nacional Electoral (INE) la que se use para verificar la afiliación de las personas.
“De igual forma, se aprobó el régimen de excepción aplicable para el uso de la aplicación móvil en los municipios de Balleza, Batopilas de Manuel Gómez Morín, Carichí, Chínipas Guachochi, Guadalupe y Calvo, Guazapares, Maguarichi, Morelos, Urique, Uruachi. En estas localidades, la verificación de las personas afiliadas podrá realizarse en físico, con el uso de formatos en papel”, añade el comunicado.
Igualmente se advierte que se emitió un Protocolo de Medidas Sanitarias y Protección a la Salud para el Desarrollo de Asambleas Municipales, Distritales y Constitutivas a celebrarse durante el Procedimiento de Constitución de nuevos Partidos Políticos Locales para prevenir los contagios de COVID-19.
De constituirse como partidos políticos emergentes, estas organizaciones se enfrentarán a su primera elección sin alianzas o coaliciones y a la obligación de cumplir con al menos el tres por ciento de la votación emitida.
De 2016 a 2021, el IEE dio más de 62 millones de pesos a partidos políticos que desaparecieron a nivel estatal, como el Partido Encuentro Social, o que no tienen ninguna representación en el Congreso, como el Partido de la Revolución Democrática.
En la elección de 2021, tres de los cuatro partidos emergentes desaparecieron: Redes Sociales Progresistas, Fuerza por México y Partido Encuentro Solidario, lo que dejó a Morena como el único partido nuevo que refrendó su registro.
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